Juventud Inesperada

Ser una belieber

Desde el 2009, tengo la dicha de ser belieber y desde ese momento mi vida cambió. No porque lo soy, sino por el trato que recibí de la gente. Todos me miraban con cara de raros porque para ese tiempo me decían que me gustaba un "gay". Perdí amigos, y cada vez que quería conocer a algún chico, este me dejaba de hablar porque me gustaba Justin. Yo nunca negué el hecho de que me encantara pero si me dolían las actitudes de la gente. Personas de mi familia se atrevieron a decirle a mi mamá que me llevara a un psicólogo, que estaba loca, que eso no era normal. ¿Acaso esas personas no viven? Por más cosas que me decían, no me importaba. Habían algunas que daba por ignoradas pero otras que realmente me dolían.

Cuando entré a la escuela intermedia, todos pensaban que me iba a dejar de gustar porque iba a "madurar" pero... madurar no significa dejar de ser yo y dejar atrás lo que me gusta, al revés, crecí y entendía más sus canciones, me identificaba más con cada una de ellas, cada día se convertía más en mi ídolo. Ni hablar de cuando Justin tuvo su caída, todos en la escuela me pasaban por el lado y me lo repetían millones de veces, los maestros lo decían en sus clases, hablaban cosas horribles de el y yo con ganas de gritar y decirle todas las cosas buenas que el tiene. Algunos de mis trabajos los hacía de el como un portafolio para la clase de inglés y todavía recuerdo las palabras que me dijo la maestra "¿Cómo es que todavía te gusta semejante cosa?" y yo felizmente y sarcásticamente le contesté "Su trabajo es corregir ¿no?.

Siempre tenía y tengo un sueño de conocerlo pues ¿quién no sueña con conocer a su ídolo?, todos me decían que estaba loca, que eso nunca iba a pasar, que yo no era la única fan pero whatever. Yo nunca permití que esos comentarios me hicieran algo. Cuando anunciaron el Believe Tour en Puerto Rico, fui la más feliz del mundo, obtuve boletos rápido aunque no participé del Meet & Greet ni me senté en arena. Fue el 19 de octubre de 2013. Ya van dos años de esa noche, la noche en la que pude cantar con mi ídolo. Ese ídolo que todavía me sigue impactando me hace sentir orgullosa.

Hoy día, lo admiro más que nunca porque se levantó, porque mejoró, porque simplemente volvió a ser Justin Bieber. Y se preguntarán ¿por qué es mi ídolo? Sencillo, he pasado por muchas inseguridades, momentos tristes en fin, su música siempre ha estado ahí, sus frases como " Nunca Digas Nunca" y "Believe" me motivan a luchar contra las personas que me dicen que nunca lo voy a lograr y que sólo estoy loca.

Realmente me han inspirado y ayudado esas frases porque hoy día soy simplemente yo, sin importar lo que digan o piensen los demás, vivo la vida como yo quiera de la mejor manera haciendo bien las cosas. Me siento feliz de poder ser libre y de poderme llamar "belieber since the beggining".

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Sentía que tenía que escribir sobre esto porque no soy la única que ha pasado por eso. Espero que se identifiquen y COMENTEN sus experiencias o cualquier cosa que hayan pasado.

Nunca olvides... "SÉ TU".