Capítulo 10

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No tardé en salir corriendo, mi corazón e aceleró tanto.
Corría y corría, volteé y venía ella detrás de mí, me ocultaba entre los pinos que había.

Mi fuerza se estaba agotando, y ella casi me alcanzaba.
Ya casi no podía salí arrastrándome, y miré que había una enorme clínica, abandonada, cómo pude me dirigí a ella, para ocultarme ahí.
Entré por una ventana, me dejé caer al suelo para descansar.

Me di cuenta que ya tenía demasiados años abandonado el lugar, por el estado de éste.
Me levanté y busqué rápido un lugar seguro, escuchaba pasos, me oculte en un enorme guardarropa.

Los pasos que llegaron hacía donde estaba. Cerré mis ojos al sentir la presencia de alguien que estaba fuera del guardarropa, sabía que era ella, la psicópata.
Se abrió la puerta, y me sorprendí al ver a Kian, me abrazó y ahora sí escuchamos unos pasos, no estábamos solos, era ella.

Juntos nos volvimos a meter al guardarropa, cerramos la puerta, escuchábamos como caminaba para un lado u otro realmente buscándome a mí, porque ella venía persiguiéndome a mí.
Estaba forzando la puerta de éste, Kian y yo, nos tomamos de las manos, me di cuenta que Kian sudaba mucho, no podía imaginar que sobrevivió sin una pierna.

-Beth, ¿Dónde estamos?
-Lo único que puedo decirte es qué estamos fuera de el laberinto, donde estábamos.
-¿Pero cómo estoy aquí?... ¿Y tú?

-Yo salí corriendo, mientras te buscaba, no te preocupes no iba a dejarte solo, sólo buscaría ayuda.

-Bueno, conmigo no sé qué pasó, sólo sé qué me desangraba, y después desperté con mi pierna vendada.

-Kian quiero pedirte perdón, me siento tan culpable por lo de tu pierna- dijo Beth, con una cara muy triste.

-No te preocupes, todo estará bien, y saldremos juntos de aquí.
Nuestra conversación término, la puerta se abrió y la psicópata nos tomó.

SECUESTRADOS© (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora