~Especial De Navidad~
(Naoki/Noah y Akemi)
(Narra Akemi)
Hoy, al fin me asignarán un humano para cuidar. Luego de tanto tiempo esperando, hoy 22 de diciembre será mi primera vez como guardiana. Dios, me concedió algo especial, tener algo de humana. Así, puedo mezclarme de manera eficaz entre ellos sin levantar sospechas.
Estoy tan emocionada.
Estoy sentada, esperando por las ordenes del Angel mayor, pasé así unos minutos hasta que llegó hacia mi. Me levanté rápidamente haciendo reverencia como respeto hacia mi mentor. El sonrió acariciando mi cabeza. Seguido, comenzó a leer el reglamento para ser guardian.
"1. Se te asignará un humano, que debes ayudar y proteger. Sin embargo, si a el humano lo asesinan, se te asignará otro."
"2. Siempre debes permanecer a su lado, especialmente tu, puedes crear un lazo de amistad con este."
"3. Jamás debes permitir enamorarte de un humano, podría ser la perdición para ambos, tu deber es solo protegerlo."
Esas, eran las 3 reglas principales. Siguió un rato citando mas reglas. Al finalizar, coloqué mi mano sobre el libro, citando el contrato de un angel guardian. En ese momento, sentí algo hermoso nacer en mi interior, ¿es esta la famosa sensación de volverte un guardián? Era una felicidad inexplicable. Canté con gozo alabando a mi Dios y agradeciendo por dejarme ser un guardián con un don único. Me sentía demasiado feliz.
Mi mentor, me observaba con orgullo. Llevo mucho tiempo esperando este momento, el lo sabe. Cuando finalice con mi agradecimiento, mi mentor se acercó hacia mi.
"Tu humano ha sido seleccionado, se llama Naoki, tiene 17 años de edad" abrió sus manos, de ellas salió una luz donde podía visualizar a un joven, su mirada era dura, su pelo azabache algo largo y lacio, sus ojos eran de un verde profundo. Su piel, casi tan blanca como la mia. "Puedes ir" me dijo. Asentí, extendiendo mis alas, se abrió un portal hacia el mundo humano, entre sin titubeo. El viaje era algo tan rápido como un parpadeo. Ya había llegado. Observé a mi alrededor, cada detalle. Nadie podía verme, ni siquiera mi humano. El solo podía sentirme. Delicadamente me pose sobre el suelo frente al chico. Su mirada era tan fría y dura como el hielo. Esto no va a ser fácil.
El chico, se encontraba en una casa algo demacrada. Y su cuerpo tenía algunos golpes. Sus ropas estaban algo rasgadas, y además algunas de sus heridas sangraban. Pero el no mostraba signos de dolor.
"Maldita sea"
Escuché que decía, confirmado, esto no será fácil.
(Narra Naoki/Noah)
Joder, otra vez esos idiotas vinieron a golpearme sin razón. Me estoy cansando de esos imbéciles de la escuela.
De repente, siento una brisa fría frente a mi. Levantó mi mirada, absolutamente nada. Creo que ya estoy alucinando de tanta sangre que perdí. Rompí la manga de mi camisa e hice un torniquete en mi brazo. Sangraba mucho, debo llegar lo antes posible a mi casa... espero que no haya nadie. Intento levantarme, mis piernas difícilmente responden, pero lo suficiente para caminar. Salgo de mi escondite, mi casa no esta tan lejos; creo que otra vez tengo el tobillo roto, duele de cojones. Cada paso hace que mi aliento se vaya, joder ¿desde cuando es tan largo este tramo? Mis piernas no pueden mas y caigo de cara al suelo. Mierda, lo que faltaba. Comienza a nevar, esto no puede ser peor. Siento unos pasos dirigiéndose hacía mi, al parecer si puede ser peor.
"Hola, ¿hay alguien ahí?" Escuchó una tierna voz de una chica, sonaba casi como un angel. No respondo a su llamado, cada vez se acerca más a mi posición, permanezco callado.
"Oye, no te ves muy bien" miro hacía arriba, frente a mi se encontraba una bella chica, en traje blanco, botas blancas, cabello largo y oscuro, ojos azules claros, casi blancos. Jamás en mi vida había visto a una chica así. Se acercó hacía mi, le lancé una seca mirada alejandome. Claro, arrastrandome por el suelo, que asco.
"Tranquilo, necesitas ayuda, si sigues ahí tirado esas heridas se infectaran" dijo mientras posaba una mano en mi rostro. Se sentía demasiado calido...
La chica, cuyo nombre desconozco. Me sentó, luego paso mi brazo por sus hombros y me levantó de un solo tirón. Me sorprendió su fuerza, digamos que no soy un chico pequeño, ni mucho menos delgado. Soy bastante ancho y algo alto. Sin embargo, no mostró esfuerzo en el proceso. Estuvo un buen rato caminando, hasta que llegamos a un lugar, donde había una pequeña casa de madera. Entramos, era realmente acogedor.
La mire en desconfianza, ella simplemente me sonreía a cada mirada fría que le lanzaba.
"¿Como te llamas?" Soltó de repente mientras buscaba algo en los gabinetes. Mantuve mi silencio, ella volteó con unas vendas, alcohol, agua oxígenada, una toalla y un recipiente lleno de agua. Permanecí sentado con mi mirada fría puesta en ella.
"Es de mala educación ignorar a la persona que te salvó" hice una mueca. Ella soltó una leve risa. Me molesta su actitud risueña.
"Me llamo Akemi, tengo 17 años ¿y tu?" La miré extrañado, no parecía de 17 años. Decidí responder de una puta vez por todas.
"Naoki, preferiblemente llámame Noah, 17" respondí seco. Ella sonrió ampliamente.
"Me gusta el nombre de Noah, ¿puedes sacarte la camisa?" Dijo de repente, noté un leve calentón en mis mejillas, rápidamente baje mi mirada y me saqué la camisa. Tenía todo el abdomen lleno de marcas moradas, y algunas heridas sangrantes. Akemi se acercó hacia mi, mojando con agua oxígenada algunas gasas y limpiando delicadamente mi abdomen y pecho, cabe decir que me esfuerzo y tengo un cuerpo bastante formado y resistente, si no fuera por eso, estaría muerto hace mucho. Al finalizar con todas mis heridas de abdomen, pecho y brazo. Me brindó una camisa.
"Me gustan las camisas anchas, creo que te quedará bien" y tal como dijo, era muy cómoda. Me pidió que me quitará los pantalones, quedando solo en camisa y mis boxers. Realmente el dolor de el tobillo me está follando la pierna entera. Cuando finalizó de desinfectar todas las heridas, vendo mi tobillo. Joder, que puto alivio. Me entregó unos pantalones largos de dormir, al parecer le roba la ropa a su hermano para dormir. Me senté en la cama que me encontraba, Akemi se sentó a mi lado.
"¿Se puede saber que te pasó?" Dijo mientras me observaba todo lleno de moretones. Dudo unos segundos antes de responder.
"En el colegio, hay un grupito que se dedica a hacer videos golpeando a los perdedores de allí, yo soy su víctima favorita ya que puedo pelear contra ellos. Es como la décima vez lo hacen, desde hace varios años." Solté directamente, se sentía jodidamente bien sacarse eso, es cierto lo que dicen, aveces un extraño puede hacerte sentir mejor que tus propios amigos. Su mirada era sorprendida.
"¿Te han hecho mucho daño las veces anteriores?"
Dijo, noté en su mirada... ¿preocupación? No puede ser, ¡me acaba de conocer! Además, soy una escoria.
"Si, me han roto algunas costillas, dejado inconsciente, me partieron el tobillo varias veces y casi me matan." Cada vez Akemi se sorprendía más, pero para mi, era algo normal. Ella acarició mi cabello, diciéndome que no deberían hacerle eso a alguien tan humilde como yo. A ellos no les importa eso, solo quieren aplastar a los más débiles. De repente, mi mirada se torna borrosa y caigo en un profundo mar oscuro.
(Narra Akemi)
Me sorprendió todo lo que ha pasado mi humano, dirán ¿no es muy pronto para usar tu don especial? Respuesta: era necesario, el iba a morir si no lo ayudaba. Además, para algo el don esta ahí ¿no? Luego de conversar, al acariciar su cabello, siento el cansancio de su mente y cuerpo, así que lo hago caer en un profundo sueño. Señor, dame fuerza y sabiduría para sobrellevar esta situación y ser una gran angel guardian.
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Continuará...
OMG! ESPECIAL! ESPECIAL!
Esto es apenas la primera de 3... creo que serán aproximadamente 3 partes de especial. Esta historia es larga... y muy interesante. HueHue >.>
Anyway, no desesperen! Ya verán de donde salió nuestro querido y tierno Manu *-*
Espero que disfruten! !!
Chao! Chao!
