Smiles. | Do Kyungsoo

3ra Sonrisa.

Chohee estaba pasando un gran momento, pero todas las cosas buenas tienen su final. El reloj en la cocina marcaba las 4:45 p.m. su papa llegaría a casa en 15 minutos y ella no estaba ahí, no quería hacerlo enojar así que se levanto de su lugar, Kyungsoo la miro contrariado, imitándola.

-es tarde, papa no tarda en llegar a casa y se molestara si no estoy ahí- el muchacho logro ver la preocupación en sus ojos que lo hizo dudar sobre si debía dejarla ir o no- me apena no poder quedarme y ayudarte a limpiar esto, pero de verdad tengo que llegar ya- la urgencia en la voz de Chohee lo hizo moverse

-no te preocupes, lo recojo cuando regrese- le dijo caminando hacia la salida

Chohee lo siguió rápido negando con la cabeza.

-No es necesario, puedo llegar sola- lo detuvo, Kyungsoo negó

No quería arriesgarse a que le pasara algo.

-no es problema, ahora vamos- le respondió tomando la mochila de la chica

Chohee lo noto sonrojándose, iba a decirle que ella podía cargarla, pero una punzada en su espalda le recordó que no era cierto.

Después de decirle su dirección-y que notara que no habría podido llegar a su casa sin antes haberse perdido-Kyungsoo la guio por las calles sin problemas, caminaron por 10 minutos y llegaron a la casa de la castaña, vivía a unas cuantas cuadras del apartamento de Kyungsoo y eso la hizo feliz.

-Gracias por... todo- le agradeció con la cabeza gacha

Kyungsoo estuvo a punto de decirle que no era nada, pero el cuerpo cálido y pequeño de Chohee abrazándolo lo dejo de piedra, el abrazo duro apenas unos segundos, tan pequeño que no fue capaz de corresponderlo.

Chohee le dedico una sonrisa cargada de agradecimiento y felicidad que lo dejo tonto por unos segundos, ella se despidió con un "adiós" y un gesto de manos tomando su mochila para después entrar rápido a su casa, Kyungsoo se despidió con la mano después de que Chohee cerrara la puerta. Una sonrisa boba se dibujo en su rostro, se sentía en las nubes y estaba seguro de que nadie arruinaría eso.

°

Entro al departamento con la sonrisa tonta decorando su rostro, sonrisa que desapareció al ver a Jongin comiendo en el sillón.

-eso no es para ti- le dijo en tono duro refiriéndose al plato de Kimchi spaghetti que el menor comía con ganas- ¡¿cuántas veces tengo que decirte que no se come en el sillón Kim Jongin?!- le regaño después, el menor rodo los ojos al escucharlo

-¡hola hyung! También me da gusto verte- le contesto con falsa alegría

-¡saca tu trasero del sillón y ve a comer a la mesa Kim!- le demando, el menor hizo un mohín negando con la cabeza- te dije que esa no era comida para ti, levántate antes de que te quite el plato- le amenazo, el menor vio su oportunidad de salvarse

-entonces ¿para quién cocinaste?- Kyungsoo maldijo ante su error- ¡no me digas que trajiste a una chica hyung!- se burlo el moreno sabiendo que eso era casi imposible, pero termino abriendo grandes sus ojos ante el sonrojo del mayor- ¡¿de verdad trajiste una chica?!- soltó con sorpresa en su tono, el sonrojo de Kyungsoo se hizo más fuerte

-e... ¡eso no te importa!- le contesto torpe y caminando a la cocina

-¡¿quien fue hyung?!- le grito desde el sillón- ¿solo comieron verdad? porque sería asqueroso que el sillón...- el menor no termino su frase mirando con asco el sillón

Salto de ahí todavía sosteniendo su plato y corrió a la cocina donde el pequeño lavaba trastes con mucha fuerza.

-dime que no usaron el sillón- exigió saber, el mayor volteo a verlo con una mirada de muerte

-¡no seas imbécil Jongin!- lo regaño con veneno en su voz y sus mejillas rojas ante el pensamiento

-¡¿por qué te estás rojo?! ¡Dijiste que no usaron el sillón!- se quejó, Kyungsoo sintió su paciencia acabarse

-¡nada paso en el sillón idiota! ¡Ahora déjame en paz!- exploto en contra del menor que tembló ante el tono molesto

Sabía que tentaba a su suerte pero esto era oro.

-Entonces... ¿quién fue la afortunada?- le pregunto con tono pícaro subiendo y bajando sus cejas, Kyungsoo soltó un grito frustrado acercándose amenazante hasta el

-¡dame ese plato!- demando corriendo hacia él, Jongin grito y corrió detrás de la mesa

-¡no hyung! ¡Es mío!-

-¡dame el plato Kim Jongin!-

-¡me rehusó!- le respondió de vuelta metiéndose todo lo que podía a la boca, su hyung nunca cocinaba para él y no podía perder su oportunidad

-¡escúpelo bestia!- le demando una vez logro tomarlo por el cuello y someterlo en la mesa, Jongin masticaba rápido negándose a escupir su comida

-¡déjame hyung!- se quejo Jongin

-¡escúpelo Kim!- el menor abrió la boca burlándose porque había logrado tragarlo todo

Aquella noche termino con un Jongin y su mejilla roja al ser restregada en la mesa por Kyungsoo, y el traste con el Kimchi spaghetti prohibido para el Kim.

°

Esa noche Chohee durmió como nunca, apenas llego a casa se encerró en su cuarto-con todo y seguro en la puerta-se arreglo para dormir y cayó rendida en su cama. No escucho los gritos y golpes de su padre afuera en su puerta y no tuvo ninguna pesadilla tampoco, por eso al despertar a la mañana siguiente sintió que sería un buen día.

Se cambio, peino y maquillo los golpes en su rostro con una sonrisa, cuando quito el seguro de su puerta y salió con cuidado de su cuarto, no le importo tener que recoger todo el desastre que su padre hacia al llegar ebrio. Puso todo en su lugar, tiro las botellas vacías, saco un paquete de galletas de una de las alacenas que había estado guardando y salió con una sonrisa de su casa caminando animada hasta la escuela.

Una vez vio el imponente edificio frente a sus ojos sus ánimos empezaron a caer poco a poco, estaba segura de que todo sería igual una vez estuviera ahí adentro. Kyungsoo había amenazado a Nayeon y sus amigas, pero ella no se quedarían en paz.

Sintió algo cálido en su pecho al recordar a Kyungsoo y todo lo que había hecho por ella, sonrió un poco agradeciéndole en su mente porque sabía que su estado de ánimo era gracias a él. Tomo una respiración profunda y con ganas renovadas camino segura la cuadra que le faltaba para llegar a la escuela, los alumnos caminaban rápido sin siquiera notarla y por unos momentos pensó que así sería.

Cuando dio dos pasos dentro de la escuela escucho su nombre, un escalofrío recorrió su espalda y se encogió en sí misma, empezó a caminar más rápido huyendo de lo que fuera que fuera a pasarle.

°

-¡Es ella!- exclamo el moreno analizando a la chica

-¿Estás seguro?- le pregunto escéptico el menor

-¡Claro que sí! Hyung fue muy especifico, además, ella está en nuestra clase- le contesto seguro empezando a seguir a la chica

-Apúrate entonces porque está huyendo-

-¡Chohee!- grito el moreno haciendo brincar a la muchacha- ¡Chohee!-

Estuvo a punto de correr de no haber sido por los dos pares de manos que la tomaron por los hombros, reprimió un grito y se encogió como un gato cerrando los ojos con fuerza.

-Eres muy rápida- dijo uno de ellos una vez los tres se detuvieron, Chohee lo único que quería era que todo acabara rápido- Lee Chohee, ¿verdad?- la muchacha abrió los ojos, podía decir que no era ella y la dejarían en paz ¿no es así?

Negó con cuidado, todavía sin voltear a ver a los dos chicos que la retenían, ambos voltearon a verse confundidos, estaban seguros de que era ella.

-¿No eres Lee Chohee?-