Epílogo

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Pasaron ya dos meses de aquel día donde le confesé todo a Alexander, desde entonces no nos hemos separado. Cada día me enamoro un poco más de él, es increíble como una persona puede cambiar drásticamente tu mundo, tu perspectiva de vida, tu forma de pensar y ver la realidad.

Aun tengo pesadillas ahora menos que antes, por lo general dormimos juntos la mayoría de la semana, él no ha querido dejarme sola y se lo agradezco porque ahora sé que lo tengo conmigo cada vez que tengo una pesadilla él me toma entre sus brazos mientras acaricia mi pelo y me dice cuanto me ama, hasta que el cansancio me gana y quedo dormida.

Nunca pensé encontrar a alguien se que preocupe tanto por mí, siempre creí que mi paso por la tierra lo iba a transitar sola aunque siempre tuve la esperanza, sabía que era imposible, pero me equivoque y me alegro.

Habíamos llegados juntos al trabajo, ya todos sabían de nuestra relación. Pero cuando recién comenzamos a salir formalmente le pedí a Alexander que no quería que me besara en la empresa, pero la conversación se nos fue de las manos y terminamos los dos enojados.

FlasBack

-creo que sería prudente que no hagamos demostraciones de afecto en la empresa- dije

-¿por qué? ¿Qué tiene de malo?- dijo el mirándome fijamente

-por qué soy tu empleada y tu mi jefe, y además hace poco te separaste de tu novia.- era más que obvio

-¿y que tiene que ver eso?

-todo tiene que ver, van a pensar que me acuesto con mi jefe para subir, van a decir que soy una ramera

-¿Por qué te importa tanto lo que dice la gente?

-eres hombre por eso no lo entiendo

-¿te avergüenzas de mí, es eso?-dijo tristemente

-claro que no- dije segura

-entonces no lo entiendo y no tiene nada que ver que sea hombre- dijo alejándose de mi

-para ustedes los hombres todo es muy simple, pueden salir con las minas que quieran y son unos genios ahora si una mujer hace eso es una puta y la condenan socialmente- ya tenía las nervios de punta me estaba poniendo tan histérica.

-¿Qué tiene que ver eso con que no queras que sepan que salimos?- dijo molesto

-todo tiene que ver, por Dios!!- dije gritando-. Sabes que las mayoría de las empleadas que salen con sus jefes son llamadas ''trepadoras'', ''rameras'', ''zorras'' y muchos sobrenombres más.

-¿tú eres todo eso?- dijo tranquilamente

-no, claro que no- ¿acaso me está tomando el pelo? Las ganas de golpearlo en su perfecto rostro me estaban consumiendo

-entonces no te debe importar lo que digan los demás, yo se quién eres tu también lo sabes y eso es lo que importa- dijo restándole importancia

-eres imposible- dije mientras me iba furiosa

Fin del BlashBack

No hablamos por días hasta que se disculpó y llegamos a un acuerdo. Luego de unas cuantas semanas deje que me besara. Pero en vedad fue que cuando se enteraron que se había separado de su novia todas las mujeres de la empresa se le tiraban encima, mis celos estaban por las nubes y como yo fui quien le pedi que no dijéramos que éramos pareja no podía hacer nada, y el maldito disfrutaba verme estallar de celos.

Luego de unas semanas ya todos en la empresa sabían que salíamos y solo algunas las más ofrecidas intentaban algo con él.

Me senté y comencé a trabajar. Llego la hora del almuerzo y salí junto con otras compañeras a comer , Alexander estaba muy ocupado así que no fui con él.

No quiero enamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora