ENAMORADA DE... ¿JEFF THE KILLER?

12.Otra vez más.

*Narra Andrea*

Después del beso que me di con Ryan, me despedí de él, y me dirigí hacia el portal, cuando escucho un ruido.
- Y ahora, ¿qué quieres?- sabía perfectamente de quién se trataba, y en un abrir y cerrar de ojos me lo encontré en frente de mi. Puse una mueca de fastidio.
-Te vi.- Me dijo muy molesto.
-¿Y? ¿Qué quieres, un aplauso?- fui a esquibarle, pero él fue más rápido y me detuvo.
-No puedes estar con ese tío, recuerda que eres mía.
Me reí.
-¿Que soy qué? Mira...- No acabé la frase ya que me vi contra la pared, y con el cuchillo de Jeff en mi garganta, parecía muy furioso, pero con la misma mostró una amplia sonrisa.
-¿Sabes perfectamente que puedo matarte aquí minsmo, no? Pero todaví no te he disfrutado del todo- Amplió aún más su sonrisa. Me entró miedo, eso tengo que admitirlo.
Escuché un ruido por los arbustos. Que me hiso reaccionar, y ponerme alerta.
Veo a Jeff como fastidiado, tal vez eso tenga que ver con él.
- ¡Venga salid!- se volvio hacia a mi. Aunque todavía tenía su cuchillo en el cuello, podía ver lo que sucedía, y veo a dos chicos de la misma estatura de Jeff. Uno tenía una máscara azul, en la cual los ojos era negros y una capucha del mismo color, y el otro tenía el pelo rubio, un gorro y vestimenta verde.

*Narra Jeff*
Justo cuando fui a llevármela, los subnormales de los chicos, hiciereon demasiado ruido, y Andrea, claramente se percató de eso.

-Me cago... ¡Venga salid!
Los imbéciles salieron y se me quedaron mirando fijamente, cuando me di cuenta, que anteriormente aflojé el cuchillo que mantenía atrapada a Andrea, que aprovechó para escapar.
-¡Mierda!- fue lo último que dije, ya que salí corriendo tras de ella. Fue fácil encontrarla, se había metido en un parque vacío.
-¿A dónde te crees que vas?
Ella siguió corriendo. Como dije, la pillé fácilmente.
-Ya está bien de jugar.- Estaba asustada y eso me encantaba. La cogí, pero intentó huir, asi que no tuvemás opción que darle un golpe fuerte en la barriga para dejarla inmóvil.
Me la llevé en brazos a una casa abandonada, a la que iva cuando quería ir a jugar.
La dejé encima del colchón, y antes de que se levantara, le agarré por los brazos, y le besé intensamente hasta que noté que le faltaba el aire.

*Andrea*
Me daba cuenta de lo que estaba pasando, no me podía mover, me faltaba el aire por culpa del golpe de Jeff. Cuando abrí los ojos me encontré en una vieja cabaña, y tenía a Jeff delante. Justo cuando intenté escapar, me cogió de los brazos, y me besó. Me empezó a faltar el aire, lo notó asi que se apartó un poco, pero empezó a besarme en el cuello, bajando hasta mi hombro. Sabía lo que pretendía.
-Jeff, por favor, otra vez no- no me hiso caso y siguió.
Subió mi camisa, pero aún no podía escapar. Ya se me empezaron a empañar los ojos. Suplicaba que no lo hiciera, aunque en el fondo sabía que no iva hacer así.
Siguió bajando hacia el ombligo, ahí se paró y bajó mi pantalón.
Volvió hacia mi, y me volvió a besar, más fuerte que antes, bajó su mano y empezó a tocarme, solté un gemido, y noto algo duro rozándome. "¡Ay mi madre!" fue lo último que pensé, dejó de tocarme y ya fue él quién empezó a desnudarse, cuando se quedó totalmente desnudo, siguió conmigo, quitándome primero el sugetador y luego las bragas.
Me volvió a besar, y bruscamente penetró en mi. Primero fue un poco lento, pero en cuestión de segundos fue más rápido. Mientras, me iva besando el cuello, mordía mi oreja... Me soltó las manos, pero en ven vez de intentar huir, llevé mis manos a su espalda mientras me retorcía de placer.
Fue llendo más rápido, hasta llegar al clímax, me daba coraje, porque me estaba encantando, gemía y sin quererlo creo, que hasta le aruñé. Bajó la intencidad, y empezó a jugar con mis senos, me miró ¿triunfante? y me volvió a besar, su lengua jugó con la mía, mientras volvía a penetrarme, estábamos los dos muy acalorados. Cuando terminó, se hiso a un lado, y besaba mi hombro, no lo miraba, sino al techo, pero cogió mi barbilla, y me hiso mirarlo. Ahora tenía otra expresión en la cara, no sabría decir cuál, me besó pero, fue un beso suave y delicado.
Pensaba que todo había terminado, pero se levantó, y me puso a... cuatro. Abrió mis mulos, e introdujo su pene, las gotas de sudor caían al colchón, solté bastantes gemidos, al igual que Jeff, se apoyó en mi, mientras entraba y salía, y así sucesivamente. La verdad, era que no quería que parace quería más, seguir experimentando, pero eso no iva a durar toda la vida. Después de seguir sudando y besándonos paramos, y me quedé dormida.

*Narra Jeff*
Se había quedado dormida, estaba muy linda, la verdad es que estaba muy bien, lo había disfrutado. Tal vez, ¿sí me gustaba? Lo dudaba yo nunca me había enamorado, lo único que había hecho en la vida era acesinar y violar a chicas. Pero me sentía raro, no se cómo explicarlo. Dejé de darle vueltas al atema, y me quedé totalmente dormido, acurrucado a Andrea.