¡Hola! (Manu Ríos)

Parte 15

Miércoles 30-Diciembre-2015

•=Manu=•

-¿Cómo está Ximena? -pregunté mientras veíamos una película en su sala.

-Mal, está muy enferma, no come, esta muy pálida, triste. En ocasiones la escucho hablar con Mel. -susurro bajo y me abrazo.

Me sentí mal al saber el estado de Ximena. No la había visto desde ayer. Era más linda en persona que por una fotografía. Tenía unas inmensas ganar de tocar su cabello y hacerla sentir mejor.

-¿Qué harán? -pregunté, porque lleva desde ayer aquí y no ha salido de esta casa. Y hoy ya estaba por acabarse.

-No tengo idea, mi mama hablo con mi tía, dijo que si era una enfermedad se quedaría aquí un tiempo. -tomo un puñado de palomitas y preste atención- Ximena es muy delicada en torno a enfermedades, por lo mientras se quedara hasta el 2 de Enero. Si empeora hasta el 7 o si mi tía decide que vuelva, mañana mismo se la llevara. -suspiro y me acurruco en mis brazos.

-Que mal, espero y se recupere. Para que pueda visitar España. -coloque mi cabeza sobre la suya y dio inicio la película.

40 minutos después escuche a alguien bajar.

-Fer, iré al centro comercial. -estaba a punto de irse pero regresó- ¿Dónde está el centro comercial? -preguntó y Fer carcajeo.

-Yo te llevo Mel, ¿Por qué quieres ir? -preguntó tomando sus llaves y las del automóvil.

-Quiero comprar algunas cosas para que Ximena este mejor. -me vio fríamente y salió por la puerta.

-¿Las llevo? -pregunté y me pare.

-No amor, mejor cuida a Ximena. Mis padres salieron y Eric no está. -me mando un beso y salió detrás de Melanie.

Me preocupa y necesito verla, la tengo a pocos metros de mí y la siento tan lejos.

Nadie estaba en casa, entonces solo estábamos ella y yo.

Me pare del sofá, tome mi móvil y subí las escaleras, busque el cuarto de visitas, en ocasiones dormía ahí.

Lo pude localizar y al llegar enfrente de la puerta pase directamente, no vi a nadie sobre la cama.

Me acerqué más y había un bulto pequeño. Sonreí ante su ternura y me senté en la cama.

-¿Tan rápido? -se movió y me abrazo por la cintura.

-Quiero irme ya, de seguro me veo fatal. -saco su cabeza y pude apreciar su cabello que seguía rizado y se veía tan tierna.

-Pero quiero recorrer España, llevo casi 2 días aquí y no he salido, solo me ducho y duermo. -se colocó sobre mi pecho y comencé a acariciar con la yema de mis dedos su cabello.

-Hueles a él... -susurro y se movió- ¿Lo abrazaste? -suspiro.

Pronto se daría cuando que no era Melanie así que actúe rápido y la tome de la cintura.

-¿Mel? No juegues así, ya estás más fuerte que yo. -seguía hablando sobre mi pecho.

-No soy Mel, Linda. -susurre y sentí como se puso estática.

Quito sus manos de mi cintura he intentó alejarse.

-Suéltame.-intento alejarse pero era más fuerte que ella.

-Lo siento, ¿sí? -puse mi barbilla sobre su cabeza.

-¿Por qué me mentiste? -su voz se quebró.

-No lo sé, no sé que pensé en ese instante. -suspire y la levante.

-Me ilusionaste. -se colocó enfrente de mi.

-Lo siento. -baje la cabeza sin dejar de sostener su cintura.

-¿Sabes? Llegue a quererte sin haberte conocido. -toco mi mejilla y rápidamente alejo su mano.

-No quería que terminara así. -sus palabras se repetían una y otra vez en mi mente.

-Yo no quería nada de ti. -susurro bajo y colocó sus manos en sus ojos.

-Yo...-no sabía qué decir.

-No digas nada. -se colocó a mi lado y me abrazo por la cintura.

-Te quiero Linda. -bese su cabello y comenzó a acariciar el mismo.

-Yo igual. -susurro y poco a poco su respiración se volvió más lenta.

Minutos después al verla tan pacifica y más linda comencé a dormir.

Ella durmió en mis brazos, ¿Qué hice? Lo arruine todo.