Capítulo 31

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En el momento que salió a la puerta principal miró a todos lados y no encontró nada fue entonces que se giró y su cara cambió de expresión.

-No puede ser.-murmuró con el corazón latiendo a mil por hora.

-No puede ser.-se repitió a si mismo.-esto tiene que ser una maldita pesadilla.

Miró las fotos que había en el tablón de la universidad y sintió que el mundo se le venía encima, fotos con Louis besándose en el entierro, fotos con Louis en el taxi, fotos con Louis paseando, etc... 

¿Quién podía haber hecho algo así?

Las lágrimas no tardaron en bajar por su rostro y sintió que se caería, de un momento a otro estaba en el suelo agarrando sus piernas para protegerse del mundo y llorando como nunca lo había echo en su vida.

¿Quién había puesto esas fotos en ese tablón para arruinar la vida de Louis y la suya? ¿Quién había sido tan egoísta?

Entonces supo que no podía pensar con claridad así, no podía hacer las cosas bien desde su punto de vista, estaba asustado. Cogió el teléfono mientras se levantaba y miraba aquellas fotos y llamó a Niall.

-¿Sí?-se oyó al otro lado del teléfono.

-Ni...-dijo sin poderse aguantar de nuevo las lágrimas y echándose a llorar.

-¿Harry? ¿Qué te ocurre? ¿Estas bien? ¿Dónde estas?-Niall sonaba preocupado.

-Estoy en la universidad.-Y tras explicarle donde se encontraba su universidad y prometer esperarlo donde se encontraba, Harry colgó.

Miró aquellas fotos y rápidamente las arrancó llevándolas a su pecho y apretándolas ahí. Eso era suyo, era su intimidad y cuando supiera quien había sido no lo dejaría ir fácilmente sin hacerle la vida imposible.

Louis.

¿Cómo estaría Louis? ¿Qué habrían hecho con Louis?  

Dio un paso para entrar dentro de la universidad pero tuvo que parar. Había prometido a Niall que lo esperaría. Se dio la vuelta y volvió a sentarse contra la pared donde minutos antes había llorado de forma descontrolada.

Un par de chicas pasaron frente a él con expresiones de pena y se acercaron.

-Harry, ¿estas bien?-preguntaron aquellas chicas que reconoció como compañeras de clase.

-Yo...-una de ellas se agachó y miró los papeles que tenía contra el pecho.

-Harry, tranquilo, mira, nosotras no te vamos a judgar. Yo desde el principio sentí que ocurría algo entre tú y el profesor Tomlinson. Pero el amor es algo bonito, no hay que judgar a las personas, yo no te juzgaré. Y si necesitas alguna vez algo, recuerda, aquí estamos para ti las tres.-finalizó la chica acariciando la mejilla del rizado con su pulgar.

Harry asintió y le regaló una sonrisa mostrando sus hoyuelos, la chica sonrió de igual manera seguida por sus amigas y se despidieron de él asegurándose primero de que alguien venía a por Harry.

Minutos más tarde Niall apareció por la puerta corriendo apurado y mirando hacia todas partes. Cuando localizó al pequeño rizado con la mirada corrió hacia él y lo abrazó frente a todos los que se encontraban allí fuera.

-Niall.-dijo Harry entre sollozos.-tengo miedo de que echen a Louis, el ama la enseñanza.-dijo hipando entre palabras.

-Tranquilo Harry, esta bien, vamos a mi coche y hablamos de ello. Estará todo bien tranquilo.-el rubio lo ayudó a levantarse y juntos fueron hacia la salida de aquel lugar.

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