Capítulo IX

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Narra Slash.

En realidad no me quería ir pero tenía que hacerlo. La estaba pasando muy bien con ella, es muy alegre y animada, sin contar que es muy decidida en todo lo que quiere. En fin, me había mandado un mensaje Steven, habíamos recobrado la amistad y ahora hacíamos cosas "malas" de nuevo juntos.
Después de mi salida de Guns N' Roses no sabía muy bien que hacer, solamente tomaba mi Jack Daniel's hasta dormirme. Hasta que un día me acordé que tenía el número de Steven y decidí llamarlo para ver en que andaba luego de todo lo ocurrido, me dijo que casi muere por culpa de la heroina pero que ya estaba mejor y que estaba metido en otros planes que no tenían nada que ver con la música. Me invitó a ser participe de esto, sin dudarlo acepté sin saber las consecuencias que me podría traer en algún futuro. Lo que hacía Steven era fabricar distintos tipos de drogas, venderlas, consumirlas obviamente y además, tener un lugar donde se hacen apuestas y se juega al poker, en donde ahora yo iba a estafar, era algo así como un casino pero dentro de un callejón y muy pocas personas podían entrar.
Fui hacía el mismo callejón en donde la última vez que vine me terminé peleando con nada más, ni nada menos que con Duff McKagan. Él quería que vuelva a la banda, "que sin mi la banda no era lo mismo" y "que debería dejar de hacer todo esto", llegó a un momento en el que sus palabras me hartaron y simplemente nos empezamos a pelear, luego de eso quedé inconsciente en brazos de Mandy.
Entré por la enorme puerta de hierro y ahí lo encontré a Steven, fumando como era costumbre.

-¿Qué pasó qué me mandaste esos mensajes tan urgentes?
- Hay que fabricar más drogas, ya no hay más y todos los apostadores vienen en un par de horas y vos ni siquieras estabas acá haciendo algo productivo para salvarnos el culo a los dos-Dijo en forma de regaño.
- Esta bien ricitos de oro, después me preparo para nuestra estafa de la noche.
- Que bueno que volvimos a estar juntos, rulos.
- Lo mismo digo-Dije mientras nos abrazabamos-Ah y Steven?
-Si, ¿Qué pasa?
- Hoy tengo que dar una clase a las siete así que vendré después.
- Pero estos hombres vendrán justo a esa hora. Cambia de horario con esa niña, esto es más importante-Dijo sin darle tanta importancia.
- Ya no es una niña, es una mujer, es mayor de edad, así que te pido que la trates como tal-Mi tono eran tan serio como mi cara en estos momentos.
-¿A caso el magnífico Saul Hudson está enamorado?-Dijo levantando ambas cejas varias veces.
- Pero que tonterías decís, cómo me voy a enamorar de ella si solo la vi un par de veces-Dije muy nervioso.
- Mira no más como te tiene, te pusiste nerviso cuando empezaste a hablar de ella, con eso ya me contestas la pregunta Hudson. Igual enamorado o no, vas a tener que venir a las siete, no podemos quedar mal con esta gente.
- Ok, estaré aquí a las siete-Dije con tono de rendición.

Así que agarré mi celular para llamar a Mandy, no iba a cancelar nuestra clase, solo la adelantaría. De verdad quería verla, era como si necesitara de ella. Sonó tres veces el teléfono hasta que por fin contestó.

- ¿Hola?-Dijeron desde la otra línea.
- Hola Mandy, soy Slash. Quería saber si podemos adelantar la clase de hoy, me surgió un imprevisto.
- Claro, no hay problema, ¿a las cinco podes?
- Sí, a las cinco estaré allí preciosa, nos vemos.
- Jaja adiós.

Cuando terminó la llamada tenía una gran sorisa en mi cara, la iba a ver y eso me ponía demasiado contento. Cuando mire a un costado lo tenía a Steven que había observado todo.

- Que lindo es el amor-Tenía una tierna sonrisa en su rostro.
- ¡Que no me enamoré!-Mientras gritaba me retiré a buscar a mi guitarra así le podría tocar algo a Mandy.
-¡Ambos sabemos que lo estás Hudson!-me gritó Steven mientras me iba.

¿A caso sí me había enamorado con tan sólo un par de días o es porque ya necesitaba a alguien que sé preocupara por mí?

El profesor HudsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora