El profesor Hudson

Capítulo XIX

Narra Slash

- Quiero que te vayas de mi casa lo más antes posible y  no vuelvas más.- Dijo mirándome sin expresión alguna, se giró y se fue. 

- Eso si fue intenso.- Dijo Steven.
- Casi te morís y ¿Eso es lo único que vas a decir?.- Dije acercandome a él.
- No se me ocurrió nada mejor para romper el hielo, lo siento. ¿Me podes compartir de esa cerveza?.- Puso su sonrisa tan característica.
- Te acaban de hacer un lavado de estómago, no podes estar hablando en serio.- Este tipo jamás aprenderá.

- En realidad si quería la cerveza, sabía que no me la ibas a dar pero nunca es malo intentarlo. Ahora... ¿Me vas a contar que pasó que se estaban gritando?.
- Pasó que soy un imbécil que ahora se quedó sin casa, otra vez.- Me senté nuevamente en la silla que estaba al lado de su camilla y me agarré la cabeza.
- ¿Podes ser más específico? Acordate que casi me muero, me perdí varios detalles.- Típico de Steven, casi se muere pero el se lo toma bien.

- La cosa es que me molesta verla con Duff, apenas llegó ya se estaban abrazando y durmiendo uno encima del otro, ¿Acaso no se acuerda que hace un par de días le dije que me gustaba? Cuestión que yo también estaba acompañado por una amiga y cuando ella se estaba por ir escuche como Mandy le decía a Duff que lo amaba, más bien, lo gritó. Ahí fue donde perdí la cabeza, tomé un poco en un bar y volví, nos gritamos, me echó de su casa y ahora estoy con vos acá.

- Wow, realmente era intenso todo. Deberías hablar con ella, explicarle lo que te pasa. Quizás te estás haciendo una película que no tiene nada que ver.- Steven no podrá controlar sus adicciones pero sabe que decir para que yo no pierda la cabeza.

- Es que creo que llegó el momento de hacer un paso al costado, todo lo que hago por ella siempre le molesta, voy a ver que hago con ello.

Después de hablar hasta las 3AM con Steven llegó el momento de irme pero ¿Adónde?. Mandy no quería que vuelva, no tengo casa gracias a Steven y mis amigos están peor que yo. En estos momentos es cuando me pongo a pensar que no debí gastar mi dinero tan alocadamente. Sí, tenía dinero, pero no como para comprar una casa en Los Ángeles.

Se me ocurrió una única solución para un momento así, llamar a Perla. Aunque recién la conocía ya me caía muy bien, hasta se quedó conmigo en el hospital, eso la hacía una gran persona, o por lo menos es lo que me muestra.

Cuando finalicé la llamada con Perla, me dijo que no tenía problema en recibirme y fui para ahí. Todavía no tenía muy en claro que iba a hacer con Mandy, si rendirme o seguir intentándolo.

Por parte estaba harto por como Mandy se manejaba respecto a mí, si hacía algo malo por más mínimo que sea, ya estaba enojada y no me hablaba.No digo que yo sea un santo pero ella también se manda sus errores. Si no quería nada conmigo ¿Para qué me siguió todo?. Pero por otra parte, quería estar con ella pese a todo, porque así con ese carácter se puede decir que me enamoró. Ahora tengo que pensar muy bien lo que voy a hacer de mi vida. 

Una vez llegado a la casa de Perla, me recibió con un café y nos pusimos a charlar de cosas triviales, en ningún momento me preguntó por qué la llamé tan tarde para venir a su casa.

Cuando se hicieron las 5, Perla me dijo que se iba a dormir y que si quería, podía dormir con ella. Pero preferí no hacerlo y dormir en su sofá. 

Me desperté por un fuerte aroma a comida, era Perla. Estaba cocinando unas milanesas, me levanté del sofá y la ayudé a terminar.

Cuando nos pusimos a comer, todo eran risas, la verdad que la estaba pasando muy bien con ella hasta que hizo la pregunta que no quería que haga.

- ¿Me vas a decir cómo fue que terminaste a la madrugada en mi casa o es secreto de estado?.- Dijo con risas.

- Sabía que tenía que contártelo en algún momento. La cuestión es que como sabes, vivo en la casa de Mandy e Izzy. Pero ayer tuve una pelea bastante fuerte con Mandy y me echó, así que no tenía donde quedarme hasta que te llamé y la verdad que me salvaste.

- ¿Cómo se atreve a echarte de su casa? Que imbécil. No lo puedo creer.- Se la notaba enojada.

- Yo tampoco esperaba que reaccionara así, pero bueno, ahora tengo que buscar un lugar para quedarme, por lo menos hasta que solucione todo.

- No te hagas problema, te podes quedar el tiempo que quieras. La mayoría del tiempo la casa está vacía, así que ya sabes, si aceptas mi invitación sos más que bienvenido.

- ¿En serio?.- Estaba sorprendido.
- Claro, para algo están los amigos ¿No?.- Me levanté de mi asiento y la abracé.
- Gracias, en serio. Te debo una grande.

Después del genial almuerzo que tuvimos, Perla se fue a su trabajo y yo me fui a visitar a Steven. Cuando estoy por llegar a la habitación de Steven me encuentro con una sorpresa: Izzy. 

- ¿Izzy?
- Ya me conoces, tengo que ver a mis hijos-amigos para retarlos después de cada problema que causan.- Dijo Izzy con tono obvio.

- Sí pero no te esperaba acá, más bien, pensé que iba a estar Steven solo...- La verdad es que por ahora no quería ver a nadie que tenga que ver con Mandy, solo quería ver a mi mejor amigo después de todo por lo que tuvo que pasar.

- Ya se que no me querés ver Hudson. Te estaba esperando. Mandy me contó lo que pasó. Más bien nos contó.
- ¿Nos?.- No comprendía lo que pasaba.
- Sí, a mi, Duff y a Steven, pero el ya sabía todo.
- Steven estaba despierto cuando nos estábamos peleando y no entendía nada.

- El que esta más enojado con vos es Duff, dice que no la podes tratar así.- Revolee los ojos.- Y tiene razón Hudson.
- Izzy, vos sabes todo lo que me importa tu hermana pero ¿Vos viste toda la escena que se mandó con Duff cuando llegó ayer?.- Ya mi tono era molesto.

- Pero son mejores amigos, y lo sabes. Además vos también estabas acompañado.
- Sí, pero era diferente...- No tenía excusa.
- Vos sabes que no. Habla con ella, no seas tan testarudo.- Me agarró el hombro.- Esta en casa, deberías ir.-  Dijo y entró a la habitación de Steven.

Quizás Izzy tenía razón y me estaba comportando como un nene celoso, pero también era culpa de Mandy por colgarse de Duff todo el tiempo. Pero sabía que lo que tenía que hacer era pedirle perdón por la manera en la que la traté, así que me dirigí a la casa de los hermanos retorcidos. Después visitaría a Steven.

Llegué a la puerta de la casa. No sé si son los nervios o qué, pero me parecía mucho más grande que antes. Después de debatir por varios minutos si entraba o no, me decidí a entrar. Y fui directo a la cocina.

- ¿Mandy est...?.- Llegué a decir antes de analizar la imagen que estaba viendo. 

Mandy y McKagan besándose en el piso de la cocina.

Después yo era el que se imaginaba cosas. 

Gracias Izzy por darme más ganas de matarme.