Capítulo XVIII

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Narra Mandy

Creo que nunca tuve un día de colegio tan asqueroso como el de hoy.

Empezó con ver a Slash con esa colorada y después el día no mejoró para nada. Me olvidé del examen de biología y el de mi materia favorita (notese el sarcasmo), música.

Lo único que quería era llegar a casa y dormir hasta que lleguen mis padres.

Decidí tomar el camino largo para llegar a casa, así que empecé a caminar mientras pensaba en todas las cosas que habían pasado en este tiempo sin mis padres, pero con Izzy.

Principalmente pensaba en Slash. Mis padres lo habían contratado para que me enseñe música y lo menos que hicimos en este tiempo fue intentar que aprendiera algo. Ahora estoy peor que nunca, seguramente tenga que dar la materia conpleta en mesa de examen. Magnífico.

Una vez llegada a la puerta de mi casa me la quedé mirando. Quizás estaba Slash todavía con la colorada y no estaba para dramas en este momento.

Me di media vuelta y me dirigí para la casa de Duff donde siempre soy bienvenida y no hay problemas.

Llego a lo de Duff, toco timbre, nadie contesta. Intento otra vez, lo mismo. Otra vez, nada.

Decidí sentarme en la acera a esperarlo, cualquier lugar era mejor que estar en casa en este momento.

¿Dónde carajos estás McKagan?

Después de esperar a mi querido amigo por más de una hora y no tener respuesta, no tuve más remedio que volver a casa. Además ya se hacía de noche y no tenia sentido seguir esperando. Quizás todo el tiempo estuvo Duff con Izzy y yo esperándolo acá.

Entré a casa como sin nada, revisé todas las habitaciones pero no había nadie.

¿Dónde carajos están todos y por qué no me llevaron?

Me recosté en el sillón, prendí la televisión y justo estaban pasando un vídeo de Guns N' Roses. No me interesaba para nada pero estaba ÉL, revoleando sus perfectos rulos. Debo admitir que toca muy bien a la guitarra.

Si bien no podía sacarle los ojos de encima también pude notar que estaban todos los chicos. Duff, Izzy, Steven, Slash, hasta esta Axl.

Me sigo preguntando que habrá pasado entre todos ellos, nunca me quieren explicar que sucedió.

El ruido del teléfono interrumpió mis pensamientos y voy corriendo a atender.

- ¿Hola?.
- Hasta que el fin contestas, te llamé toda la tarde- Era Izzy, retándome como siempre.- Estoy en el Grey Sloan Memorial Hospital.
- ¿QUÉ? ¿QUÉ TE PASÓ? ¿ESTÁS BIEN?.- Casi me agarra un infarto.
- No me pasó nada quédate tranquila, el que está mal es Steven.- Decía con voz triste.
- ¿Qué le pasó? ¿Está muy mal? ¿Puedo ir?.
- Tuvo una sobredosis. Sí. Sí quieres.- Dijo respondiendo en orden cada una de mis preguntas.
- Ok, ya salgo para ahí.- Dije cortando la llamada.

Ahora tenía sentido porque no encontraba a nadie. Todos estaban con Steven en el hospital.

Pobre Steven, ya le había tomado bastante cariño, él es tan bueno y bastante gracioso, lastima que no controlaba bien lo que consumía.

Cuando llego al hospital veo que están todos sentados en la sala de espera. Incluida la colorada de esta mañana. Esto no podría estar peor.

El primero en notar mi presencia fue Duff, que me vio y no tardó ni dos segundos en agarrarme con sus largos brazos para formar un abrazo.

Pude ver como Slash miraba toda la escena y corría su vista para otro lado mientras su "amiga" le hablaba.

- Necesitaba un abrazo tuyo.- Me decía Duff al oído sin cortar el abrazo.
- Va a mejorarse, quédate tranquilo. ¿Les avisaron cómo está?
- Los médicos le están haciendo un lavaje de estómago.- Decía mientras me soltaba.- Ahora solo queda esperar.

El profesor HudsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora