Por desgracia, el domingo llegó muy rápido y tenían que recoger las cosas para volver a casa. Ninguno de los dos quería volver, pero era lo que tenían que hacer.
-Jo, no quiero irme. ¿Por qué no podemos vivir juntos ya? –Dice Valentina haciendo pucheros.
-Porque no tenemos como mantener la casa, los gastos, ni sabemos cocinar. Y hacer macarrones y pedir comida precocinada no es cocinar. –Dice Hugo poniéndose la camisa.
-No es justo. Hay muchas parejas que al poco de conocerse se van a vivir juntos.
-Te prometo que cuando tengamos un poquito de dinero ahorrado, nos compramos una casa. –Le dice Hugo a Valentina mientras le toca la nariz.
Se montan en el coche que les devolverá de vuelta hacia sus casas.
Son las nueve y media y Rodrigo llama al teléfono de Hugo.
-¡Tío! ¡Quedamos todos juntos para despedir a la novia de Mario, ¿no vas a venir? –Le dice su amigo.
-¡Es verdad, ya ni me acordaba! –Dice Hugo echándose las manos a la cabeza. –En media hora, estoy allí, no tardo.
-¿Quién era? –Dice Valentina.
-Rodrigo. La novia de Mario se va de Erasmus a Inglaterra y nos ha pedido que la despidamos. Así que hasta aquí ha llegado el fin de semana más bonito de mi vida. Ahora hay que volver a la normalidad.
-¿De verdad que te ha gustado? ¿Todo? ¿Todo? –Dice Valentina.
-Todo, todo. Me gustas tú y siempre va a ser así, pase lo que pase. –Dice Hugo, mientras la coge del mentón y le da un suave beso de despedida.
-Ten cuidado y no te metas en líos.
Valentina entra a su casa ilusionadísima. Está súper feliz. Ha pasado un fin de semana encantador y ha perdido su virginidad con el chico al que ama.
Hugo, se dirige hacia el parque dónde habían quedado todos. Allí está Rodrigo, Nico, Alesandro y entre todos ellos, ve a Carmina. No le apetece que le fastidie todo lo que ha conseguido con Valentina, así que decide pasar de ella.
-Bueno, ya estamos todos. Podemos empezar la fiesta. –Dicen unos cuantos.
-¿Fiesta? ¿Vamos a beber? –Dice Hugo a su amigo Rodrigo. –No quiero trasnochar. Estoy un poco cansado. –Dice mientras que suelta una sonrisa risueña.
-¿Tú has follado? Sólo te ríes así cuando lo haces. Y te la he visto varias veces. ¡¡¡Escuchar!!! ¡Valentina y Hugo, ya follan! –Dice Rodrigo alertando a todos los que están en la fiesta.
En ese momento, todos van un poco chispados, incluso Hugo. Pero está feliz. El sigue con que no quiere irse muy tarde. Pero son las cuatro y sigue allí. Justo, aparece Carmina.
-Hola Hugo. ¿Qué tal? –Dice Carmina insinuándose a Hugo.
-Bien hasta que llegaste. Gracias.
-Anda Huguito, no digas eso, sabes que en el fondo te sigo gustando. –Mientras le dice eso, se acerca cada vez más a su cara.
-Carmina, para. Estoy con Valentina. Además estas borracha y apestas a alcohol.
-La verdad es que no sé lo que has podido ver en esa estúpida cría de mierda.
-No te voy a conseguir que me hables así de ella. ¿Me oyes? –Mientras dices esas palabras se levanta y Carmina se levanta después.
-Si no eres mío, no vas a ser de esa asquerosa. –En cuanto Hugo quiere reaccionar, tiene a Carmina comiéndole la boca. Se la quita de un empujón, pero cuando se quiere dar cuenta, ya le han hecho unas cuantas fotos.
-No tenía que haber venido. –Se marcha furioso.
Carmina aprovecha el momento y le manda la foto a Valentina.
"Tu novio, no se acordaba mucho de ti esta noche.
Besos Guapa"
Hugo va hacia su casa para explicarle lo que les ha pasado. Son las cinco y media de la mañana, con un poquito de suerte estarán todos dormidos y no les despertará. Cuando va hacia su casa, recibe un mensaje.
"¿A esto es a lo que te dedicas cuando no estoy? Me has dejado claro que para ti sólo era un polvo fácil. Gracias por joderme, Hugo"
Hugo que lee el mensaje, corre despavorido hacia la casa de Valentina. Llama a la puerta, dándole igual que sea tan pronto.
-Mamá, mamá, no abras.
-¿Por qué hija? Parece importante. –Dice Babi mientras se acerca a la puerta para mirar quien es. –Es el hijo de Gin y Hugo, ¿Por qué está en casa y llamando a golpes?
-Sólo no le abras mamá, por favor. –Mientras dice esas palabras se echa a llorar. –Está bien, vete a tu cuarto, yo me encargo.
Babi abre la puerta, Hugo que piensa que es Valentina se arrodilla.
-¡Por fa...! –Dice llorando.
-¿Qué ha pasado? ¿Por qué vienes a estas horas? –Dice Babi pidiéndole que se ponga de pie.
-Ocurrió un malentendido y llegó a oídos de Valentina y ahora no me quiere ver. –Dice con las lágrimas en los ojos.
-No sé qué es lo que habrá pasado, aunque me lo puedo imaginar. Espérate a mañana a que se le pase un poco y habláis de lo sucedido. Es mejor que te vayas, aquí ahora no haces nada.
Pasó la noche, Babi visitó a su hija a su habitación y se la encontró justamente como estaba ella unos años atrás.
-Hija, sé que ahora Hugo te parece el peor hombre del mundo, pero tienes que dejar que te lo explique. Todo el mundo necesita una oportunidad de ser escuchado y entendido. Si no haces las cosas bien, te puedes estar arrepintiendo toda la vida. No quiero que pases por lo que pasé yo.
Valentina se giró y la miró extrañada.
-¿Mamá? ¿Es sobre aquel muchacho al que le llamaban "Hache"?
-Ahora no estamos hablando de mí. Pero esta vez, hazme caso. No sé ni cuánto tiempo lleváis, ni lo que os ha pasado, pero un hombre no se arrodilla delante de la madre de su chica a las cinco de mañana. Piénsatelo.
Valentina hizo caso a su madre y llamó a Hugo.
-¿Val? ¿Eres tú? Por favor, perdóname yo no quería, estaba borracha, sólo quiere meterse en nuestra relación. Por favor...
-Shhh, tenía que haberte dejado explicar lo que te había pasado, mañana podemos quedar a la hora de la salida y hablar. ¿Vale?
-Claro nena, allí estaré. Perdóname.
-Te amo mucho Hugo, no quiero que nada nos separe, ni se ponga por el medio, no ahora.
-Eso no pasará. Te amo cielo.
-Yo también te amo mi amor.
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Cuando Me Necesites.
Fanfiction¿Cómo serán las caras de Hugo y Babi cuándo se vuelvan a encontrar? ¿Volverán a revivir la llama de la pasión, como hace 20 años? Si quieres saberlo, sólo tienes que seguir esta novela.