Capítulo 96.

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"Tenemos que hablar. No tengo tiempo de contarte de qué es, duerme bien x"

No sabías que te asustaba más. "Tenemos que hablar" o el hecho de que no te dijo que te amaba. O que no puso una carita... te preocupaba el hecho de que hayas hecho algo mal, o tal vez el MODEST haya decidido que no habría más relación. En minutos sentiste que tenías la necesidad de viajar y transportarte a dónde estaba Niall, para pedirle una explicación.
De transcurso a tu casa, no dejabas de pensar en ello. Scarleth se quedaría a dormir contigo ya que le daba algo de pereza tener que regresar de tan cansada que estaba. Mientras tomabas agua en la cocina, esperando a que Scarleth terminara de avisar que se quedaría contigo, tu mamá te vio con ese ceño fruncido y ojos perdidos...

TM: ¿Qué tienes?
Tu: ¿He?
TM: Qué, ¿Qué tienes? –repitió.
Tu: Ah nada.
TM: ¿Segura?
Tu: Sí. Estoy aturdida, creo que comí mucho...
TM: Bueno, ya sabes qué te escucho. –Sonrió-
Tu: Gracias. –Sonreíste sin ganas- buenas noches.

No esperaste respuesta.
Scarleth se encontraba ya caminando a tu habitación, por lo cual la seguiste.
Te quitaste los zapatos altos, sintiendo una gratificación del señor de los cielos por ya no tener que llevarlos puestos. Te quitaste el vestido y lo doblaste un poco para que no se ensuciara más. Scarleth estaba en el baño mientras tú mirabas a la nada preguntándote qué será lo que él necesita decirte.

Scarleth: ¿Qué pasa? –Preguntó entrando a la habitación.
Tu: ¡Me asustaste! –Rezongaste sobresaltada.
Scarleth: -Soltó una risita- ya, bien. Lo siento.
Tu: Está bien. –Te echaste en la cama.
Scarleth: ¿Cómo te la has pasado en tu noche?
Tu: Bien, supongo.
Scarleth: Ya, ¿Qué pasa? –Se acostó a tu lado.
Tu: ve los mensajes... el último. –Le entregaste tu teléfono celular.

Lo leyó. Frunció el ceño y te miró confundida.

Scarleth: ¿De qué te preocupas?
Tu: ¿Y si me quiere terminar?
Scarleth: Ay por favor... -Suspiró.
Tu: ¿Qué? El modest nos tiene mal a ambos. Tal vez es por ello...
Scarleth: Lo más probable de la ruptura mental que estás haciéndote puede ser por el MODEST. Porque de dejarte de querer... es imposible.
Tu: ¿Cómo sabes tú qué no me dejará de querer?
Scarleth: porque tienes todo lo que él quiere, por eso.
Tu: ¿y si ya no?
Scarleth: hace tiempo no eras tan insegura. Ahora has vuelto a serlo.
Tu: Él me hace sentir segura.
Scarleth: No hay motivo para que este chico te deje. Estoy segura. Y si no me crees. Mándale un mensaje diciéndole que te adelante un poco o seguirás molestándolo con los mensajes.
Tu: No quiero saber la respuesta.
Scarleth: Hace unos minutos sí. –Respondió algo irritada- por Dios ____, ya lo he enviado.

Dijo rápidamente tecleando.
No pudiste detenerla, solo viste el "MENSAJE ENVIADO" en toda tu pantalla.

Tu: Si muero en llanto será tu culpa.
Scarleth: Puedo vivir sin culpa. –Bromeó.

Te hizo reír. Si tu mejor amiga quería saber también, ¿Qué mejor?

"No podemos seguir con esta relación, eso pasa. Te llamo luego x descansa" –Leyó en voz alta.

Tu: Ay no... -Te tapaste el rostro con las manos. Esperabas un "Sólo bromeo" de Scarleth.
Scarleth: Rubio jactancioso, que lo diga cara a cara. –Dijo furiosa- me dan ganas de responderle de que se va a morir.
Tu: No lo hagas... -Dijiste con los ojos llenos de lágrimas.

¿Te estaba terminando por teléfono? ¿Era eso acaso?
Scarleth abrazó. Las lágrimas salieron corriendo como fuente. ¿era posible que fuese tan brusco con las palabras? No sabías si llorabas porque ya no tenías a tu lado a esa persona que te hacía sentir fuerte y segura, querida y valorada... o el hecho de que no fuiste suficiente jamás para él.
Después de que te rendiste en los brazos de Morfeo por tanto llorar, Scarleth también rindió.
Al día siguiente, al despertar volviste a sentir la necesidad de llorar. Ese hueco que se estaba formando dentro de ti no te estaba dejando pensar claramente. Estabas pensando en tu vida sin él, ¿por qué estabas hiriéndote tanto?
No podías imaginarte a Niall a lado de la persona que ahora es dueño de su corazón. Episodios repetidos de ambos pasaban volando por tu mente.
Scarleth estaba bien dormida, ni el hecho de que te escuchase moquear la despertaría.
Te levantaste al baño y lavaste tu rostro. Tomaste tu celular contigo, con la esperanza de tener un mensaje nuevo.
Las mañanas eran de sorpresas desde que estabas con Niall. A veces llegaba a pedir flores a domicilio para ti, a veces te mandaba regalos o a veces sólo te pedía que vigilaras si habían llegado sus cartas que tal vez no decían nada romántico, sino un gran te quiero.
Esa mañana no mandó nada, no te sorprendió, claro, había post-terminado contigo.
Volviste a echarte en la cama, y Scarleth no despertó.
Escribías mensajes sin enviarlos: "¿Me estás terminando?" y al instante lo borrabas. Volvías a escribir "¿Estás seguro de esto? Yo no..." y borrabas... "No podré vivir sin ti Niall, enserio creo que eras el soporte de mi vida" y volvías a borrar.
Dejaste de teclear cuando Scarleth se levantó al baño...

Scarleth: te habla tu mamá. –Dijo cuando regresó del baño.
Tu: ¿A mí?
Scarleth: A la mapachito que está llorando... obvio a ti. –Limpió las lágrimas con sus pulgares y te abrazó- ánimo, sé que no es lo que pensamos ayer. –Sonrió gélidamente.

"Mapachito"... así te decía él.
No respondiste. Te dirigiste a donde estaba tu madre y te dijo que salieras porque tenías visitas. Vaya, ¿Qué te importaban las visitas si no eran Niall? Querías gritarle aquello, pero mejor sólo le hiciste caso. Te paraste en el marco de la puerta, entrecerraste los ojos por el sol y ubicaste a alguien caminando hacia ti.

"Ojalá fuese una señal de Niall" –pensaste.


You'll never love yourself Half as much as I love you | n.h.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora