Capítulo 39.

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 Al estar en una distancia razonable, sin tocarte se acercó a tus labios y se hundió en ellos.
Pero lo detuviste.

Tu: No, no...

Pensabas: Si solo fuésemos algo más...

Niall: -Sonrió- lo siento. Estabas muy... cerca.
Tu: -Reíste- ajá, ya sabes que sí.
Niall: -Niall tomó tu mano- caminemos así. –entrelazó sus dedos con los tuyos.

Tu pulso cardiaco era como hormiguitas en azúcar. No te negaste y ambos caminaron de la mano. Compró sus tan mencionadas mentitas y regresaron a tu casa.

Tu: Ya no pasarán más taxis. –Mentiste.
Niall: Lo supuse.
Tu: ¿Te quedas a dormir?
Niall: Claro, ¿no habrá problema con tus padres?
Tu: Sí, pero la solución está en que te quedes en mi habitación y yo en otra.
Niall: ¿segura?
Tu: Sí, y sirve que lavo tus medias. –Sonreíste.
Niall: Bien...

Tomaste la llave y abriste la puerta de tu casa. Tu mamá estaba bajando las escaleras cuando los vio llegar.

TM: Buenas noches, ¿Cómo les fue?
Niall: Bien. –sonrió- ¿La hemos despertado?
TM: No, he venido por algo de agua.
Tu: Mamá, Niall se quedará a dormir, ¿está bien?
TM: Ah, Claro, ¿Le darás tu habitación?
Tu: Sí, yo dormiré... aquí en la sala.
TM: Bien, estás en tu casa hijo. –Le dijo a Niall.
Niall: Gracias. –Sonrió
Tu: Vamos, subiré por mi pijama y ya te quedas en mi habitación.

Niall subió detrás de ti y al llegar a tu habitación se sentó en tu cama.

Niall: ¿Segura que quieres dormir en el sofá? Yo puedo hacerlo.
Tu: Nope. Tú duermes aquí.
Niall: Pero... -interrumpiste
Tu: No, tú aquí y yo allá. Punto final.
Niall: Bien, bien. –Dijo al levantar sus palmas.

Tomaste tu pijama y guardaste tus zapatos altos.

Tu: ¿Quieres alguna de mis camisetas para dormir? Son grandes y holgadas.
Niall: No, puedo dormir con esta ropa.
Tu: ¿Seguro?
Niall: Sí. –Sonrió.
Tu: Bien. Buenas noches. –Sonreíste.
Niall: Buenas noches. –Te sonrió.

Lo miraste unos segundos deseando darle un beso, pero tu dignidad como SOLAMENTE amiga de él te estaba ganando.

Tu: Nos vemos mañana...
Niall: Claro que sí.
Tu: Ya pues, ya me voy. –Dijiste algo nerviosa y saliste de la habitación.

Tomaste una frazada y una almohada. Tu mamá se dirigía a su habitación.

TM: ¿Ya está descansando?
Tu: ¿Niall?
TM: Si
Tu: Si, ya está en mi habitación.
TM: Bien... -Suspiró- buenas noches.
Tu: Buenas noches... -Sonreíste.

Al día siguiente, recibiste un mensaje de texto, por alguna razón estaba tu teléfono celular, frente al sofá.
Era Niall, que decía:

"Huele demasiado bien, ¿Eres tú quien está cocinando? Buenos días, xx"

Reíste, ¿por qué no habrá bajado a la cocina? te levantaste y te tallaste los ojos. Te dirigiste al baño. Luego de ello, subiste a tu habitación. Estaba acostado de lado derecho y abrazaba una de tus almohadas. Cuando te vio, pudiste ver sus ojeras y cabellos alborotados.

Tu: ¿Dormiste bien?
Niall: Si, ¿y tú?
Tu: También. –Sonreíste- ¿Tienes hambre?
Niall: Siempre...
Tu: Mi mamá ha preparado desayuno para ambos, se irá a trabajar, y luego no sé, te acompaño a tu hotel.
Niall: Me parece perfecto. –Dijo al levantarse- tu cama es realmente cómoda.
Tu: ¿Enserio?
Niall: Demasiado...

Ambos se dirigieron a la cocina, y se sentaron a desayunar. Tu mamá había hecho un manjar, y Niall no pudo enamorarse más de la comida de tu madre hasta que la conoció.
Ella se fue dejándolos con tu padre, quien empacaba para irse a trabajar de nuevo.

Niall: 


You'll never love yourself Half as much as I love you | n.h.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora