Mi Sueño, Mi Pesadilla: Solo ella y yo [Michael Jackson] {#2}

Capítulo VIII - Otra vez en las noticias

—¡Jessie! ¡Catrinah!

Corrí a abrazarlas, no podía creer que estuvieran aquí.

—Adelante, entren. Bienvenidas.

—Gracias.

—¿Qué hacen aquí?

—Visitando a la embarazada, ¿es que acaso no podemos?

Reí.

—Por supuesto que sí, me alegra de que estén aquí.

No se los había mencionado, pero aún seguía en contacto con las chicas, son mis mejores amigas, las adoro.

En eso, vimos a Mackenzie asomarse desde la habitación.

—Llegaron pronto... —Mack salió del cuarto para saludar.

—¿Tú sabías que vendrían? —Pregunté sorprendida.

—Yo las invité... Creí que te ayudarían a salir de la depresión. Son tus mejores amigas.

—Muchísimas gracias, te adoro. Eres la mejor.

Rió.

—De nada. Ahora que tienes compañía, me voy con Nick —Cogió su bolso y sus llaves. Abrió la puerta y salió.

—¡Usa protección! —Grité para que pudiera oírme.

—¡Perra! —Dijo.

—¡Yo también te quiero! —Todas reímos.

—No te pediremos que nos cuentes qué pasó, sólo quedemos que estés bien, por eso estamos aquí. Ahora vístete porque iremos de compras —Caty sonrió.

Y eso hice.

Cogimos un taxi y fuimos al centro comercial. Comimos helado, bebimos café (Para mí, sin cafeína), hicimos de todo.

Las chicas me compraron ropa de embarazada que monas son.

—¡Mira! Esta bata me encanta. Te quedará perfecta cuando estés gorda como una vaca...

—¡Jessie! —Le di un golpe en el hombro.

Catrinah se estaba riendo así que le di un golpe a ella también.

—Auch... ¿Por qué la violencia?

—Por mala...

—Pero si fue ella la que...

—¡Sigamos! Jessie interrumpió a Catrinah mientras ponía dos batas en el carrito—. Ahora, los pantalones.

Nos dirigimos a la zona de pantalones para embarazadas.

Estábamos viéndolos, y pensando en qué talla usaría cuando me creciera la barriga.

De repente vi a una mujer embarazada en la parte de bebés, estaba con su pareja. Reían y sonreían, miraban los bodys y las pijamas. Se me encogió el corazón. Estoy segura de que a Mike le habría encantado venir a comprar las cosas conmigo, le habría encantado vivir el embarazo, pero el solito se ganó su castigo.

—Chloe... Chloe... ¿Qué tienes? -Me preguntó Jessie al verme paralizada mirando a aquella pareja. Los ojos se me volvían cristalinos. Me habría gustado vivir la experiencia con Michael.

—Nada... Estoy bien —Se me escapó una lagrimita y la limpié-, estoy bien. No se preocupen.

No se quedaron totalmente convencidas, pero dejaron de preguntar, ya saben que es por Michael.

Varias veces me pedían autógrafos y fotos. Me hacía ilusión tener fans, pero me preocupan los paparazzis, de seguro están por ahí rondando.Mañana puede que salga en las noticias.