I Want To Live My Eternity By Your Side [AU- Ziall Horalik] |Sin Editar|

capítulo diecinueve

Unieron sus labios en un suave y tierno beso, ambos movían sus labios al ritmo del otro, lo hacían de manera lenta por lo que no llegaron a profundizar. Zayn rodeo a Niall por la cintura mientras este ultimo enredaba sus dedos en el cabello del moreno. Continuaron así por un rato mas hasta que la falta de oxigeno se hizo presente. Ambos se separaron lentamente y se quedaron mirando un momento, luego, ambos se sonrieron y se dieron otro corto y rápido beso. El rubio se bajo de encima del moreno, se tumbo a su lado y volvió a colocar su cabeza en el pecho del moreno. Zayn le acariciaba la cabeza mientras miraba el techo, la sonrisa en su cara todavía no había desaparecido. La habitación estaba en completo silencio, nadie dijo nada, ambos permanecieron en silencio durante un largo rato. Niall escuchaba latir el corazón de Zayn y también sentía como su pecho subía y bajaba. Zayn solo seguía acariciando la cabeza al rubio. Pasaron unos minutos más y el rubio por fin decidió hablar.

-Gracias...-Dijo el rubio-

-¿Porqué?-Pregunto confundido el moreno-

-Por el beso-El ojiazul se sonrojo cuando lo dijo-

-Es algo que he querido hacer desde que te conocí-Sonrío el moreno-

-Pues...yo igual-Confeso el rubio-

Niall levanto la cabeza y lo miro por un momento al moreno, luego subió un poco y se quedo cara a cara con el moreno, este último sonrió y Niall lo imito, se miraron y ambos quedaron hipnotizados por los ojos del otro. Ahora fue Niall quien decidió acortar la distancia, inclino su rostro hacia adelante y volvió a unir sus labios con los del moreno. El beso no duro tanto como el anterior, el rubio antes de separarse del moreno, mordió el labio inferior de este último y tiró un poco de el.

-Auch-se quejó el moreno y Niall solo soltó una pequeña risita-

Niall se alejo de donde estaba y se sentó en la cama, tenía una sonrisa de punta a punta que no se le iba y ya le estaba comenzando a doler la mandíbula.

-Zayn... me gustaría estar acostado todo el día contigo, en serió, pero tengo que enseñarte matemáticas.

-Oooooohhh-Protesto el moreno-

-Nada de ooh, levántate y saca tu carpeta-Lo regaño divertido Niall-

-¿Me ayudas a levantarme?-Zayn estiro el brazo-

-Niall se levanto de la cama, tomo el brazo de Zayn y tiro hacia el, el moreno rápidamente ya estaba de píe, pero en ese momento, le robo un beso a Niall-¡Hey! Eso no se vale-Dijo el rubio riéndose-

Zayn solo soltó una pequeña risita, fue hacia donde estaba su mochila, saco su carpeta y se sento en una de las sillas que había en el escritorio. Niall saco su carpeta y se sento al lado del moreno.

-Bien, comencemos...-Dijo el rubio abriendo su carpeta-

*Louis*

Después de haberse despedido del ruloso, el ojiazul entro a su casa y se dirigió a su habitación. Se recostó en su cama, y se quedó mirando el techo. Varias preguntas pasaban por la cabeza del castaño. ''¿Por qué lo miraban así?''... ''¿Que somos Harry y yo?''... ''¿Somos...amigos? ¿amigos con derechos? ¿novios? ¿alguien con quien solo pasar el rato?''. Todas eran preguntas sin respuestas, Louis quería a Harry, a pesar de haberlo conocido hace apenas unos días, el castaño le quería pedir al ruloso que fuera su novio, pero... y si Harry no quería? Tal vez era muy rápido o tal vez no. El ojiazul se levanto de su cama y bajo a la cocina, se dirigió hacia donde estaba el teléfono y marco el numero de la pizzeria, luego de 15 minutos, el timbre de su casa sonó, dando a entender de que su comida ya había llegado, se dirigió a la entrada, recibió su comida, le pago al muchacho, cerro la puerta y se dirigió al comedor. El ojiazul ya estaba acostumbrado a comer solo, ya que sus padres trabajaban todo el día, mientras estaba comiendo, Louis estaba pensando en que hacer con Harry, si pedirle al ruloso que sean algo mas serio o... dejar las cosas como están. Cuando iba por la sexta porción, Louis finalmente se decidió que hacer, esta tarde, cuando lo vea, le preguntaría a Harry si quería ser mas que amigos, amigos con derecho, o lo que sea que fueran.

*Liam*

El castaño ya se estaba cansando de recorrer la ciudad. En cualquier parte que fuese, no había señal de algún Kronnos o algo relacionado con ellos. Mientras iba caminando, y buscando alguna señal de algún kronnos, iba apreciando la bella ciudad de Londres, hacía siglos que no había estado allí. Continuo caminando un rato más y se detuvo en un Starbucks a comprar un capuchino. Mientras estaba esperando su turno, varías chicas lo miraban de arriba a abajo y susurraban cosas y se reían por lo bajo, el castaño solo las miro, les dedico una sonrisa y le guiño el ojo, las chicas solo se sonrojaron y seguían secreteándose cosas. ''Es tan lindo'' dijo una de ellas por lo bajo pero Liam la escucho, el castaño no dijo nada, solo le volvió a sonreír.

-Aquí tienes amigo, tu capuchino.-Dijo el joven de la caja registradora-

-Gracias-contesto el castaño, le entrego el dinero y salio del local-

Una vez afuera, se volvió a colocar sus gafas de sol y continuo caminando. La ciudad ese día estaba muy tranquila, no había mucho trafico ni tampoco había mucha gente. El castaño terminó su capuchino y tiro el vaso en un cesto de la basura. Continuo su paso, pero de la nada se detuvo rápidamente, su expresión era totalmente serio, miro hacia su derecha y había un callejón con varias bolsas tiradas y al fondo de este mismo, se podía ver un gran portón, algo deteriorado, que estaba totalmente abierto. Liam lo miro por un instante y comenzó a caminar hacia el, saco las manos de los bolsillos del pantalón y estiro uno de sus brazos abriendo la palma del mismo, había algo allí, algo maligno, el castaño podía sentirlo, cuando llego a la puerta la miro por un instante, tratando de encontrar algún mensaje o palabra oculta, pero no había nada, de echo, la puerta estaba totalmente llena de telarañas, Liam las removió con cuidado y poco a poco fue entrando hacia aquel misterioso lugar. Hizo unos cuantos pasos y pudo ver que el lugar estaba abandonado, era una fabrica, sabrá quien de qué, todo allí adentro estaba cubierto de polvo y de telarañas, las ventanas estaban todas rotas, y el techo estaba repleto de palomas. Liam las observo por un momento y hizo una mueca de asquerosidad, el castaño odiaba a esos animales. La energía negativa ya no se encontraba allí, no había nada... o eso creía.

-Ya se que estas allí, muéstrate...-Dijo el castaño a unas de las maquinas, pero no se escuchaba nada, ni tampoco a nadie-Puedo sentir tu presencia, sal de ahí-volvió a decir Liam-

De repente algo o mejor dicho alguien comenzó a salir poco a poco de detrás de la maquina. Era una chica muy bonita mas o menos de la edad de Liam, tenía el pelo rubio, sus ojos rojos, era muy blanca, mas que blanca parecía pálida, tenía un cuerpo bien formado y una buena estatura.

-Hola Liam-Dijo ella con una sonrisa tranquilizadora-

-¿Como sabes mi nombre?