Enamorada De Un Idiota (Book 1) [Kellin Quinn Y Tu]

CAPÍTULO XXXIII

Entraron en el auto de Kellin.

______ lo miraba de reojo de vez en cuando, él llevaba casi una hora manejando en total y completo silencio y no tenía ni la más mínima idea de a dónde se dirigían.

—Vaya que te gusta mirarme.

—No te estoy mirando —le dijo mientras sentía que sus mejillas se enrojecían.

—Te he pillado dos o tres veces mirándome.

—No es cierto.

—¿Por qué te cuesta tanto admitir que te gusto? —le preguntó con media sonrisa.

—No me gustas —le dijo mientras miraba por fuera de la ventana del auto.

—Pues tú si me gustas.

______ lo miró alarmada y sin saber que contestarle ante tal declaración. Kellin, por su parte, sólo le dedicó una sonrisa coqueta.

—Me gustas —repitió con firmeza—. Y mucho, para serte sincero.

—No seas estúpido, yo no te gusto.

—¿Por qué piensas que no podrías gustarme? —le cuestionó.

—¿Por qué? No soy tu tipo de chicas —le contestó—. Yo no soy el tipo de chica que tú buscas.

—Pero me gustas. ¿Qué tiene de malo eso? Me gustas, me gusta tu carácter tan insoportable, tu manía por pasarte las manos por el cabello cuando estás nerviosa, tu sonrisa torcida cuando finges que algo te agrada, me gusta que escuches la música a todo volumen y me encanta que bailes cuando crees que nadie te está viendo.

Kellin despegó la mirada del camino por un momento para verla a ella.

—Me gustas. Me ha costado mucho tiempo darme cuenta de ello. Y sé que no soy el mejor partido, y sé que soy increíblemente bueno en fastidiarte, pero en realidad me encantaría que me dieras una oportunidad.

El corazón de ______ se aceleró cuando Kellin le pidió aquello. Las manos le empezaron a temblar y dejó de respirar. Ni siquiera podía articular palabra alguna.