Capítulo 7

22 4 0
                                    

Habían pasado solo un par de días desde que Alicia despertó en el hospital. Jorge no quería volver a su casa y se quedaba con ella siempre. ¿Los padres de Alicia? No conseguíamos contactar con ellos y habíamos puesto una denuncia a la policía. 


Hoy Marco y yo habíamos decidido salir un rato fuera del hospital. El olor me estaba poniendo enferma y respirar aire fresco era bueno, a pesar del frío que hacia. Ambos estábamos cogidos de la manos, yo con la cara tapada hasta la nariz con la bufanda y Marco mirandome sin expresión alguna. Es cierto, por el tema de Alicia, él y yo no hemos hecho nada como pareja, apenas como amigos. Él sabe que yo estaba ocupada pero... ¿Tan mal me he comportado con él? Seguimos en silencio durante un rato, nos metimos a una cafetería y pedimos algo. Decidí romper ese estúpido silencio.

-¿Marco?

No recibí ninguna respuesta, solo un simple silencio.

-¡Marco! -Le volví a gritar-.

-¿Eh? ¿Qué pasa Marta? -En ese momento se tapo la boca con la mano-.

-¿Marta? ¿Qué Marta?

-Es solo... Una amiga -Dijo mientras se quitaba la mano de la boca y miraba a la camarera que nos traía el café-.

-Está bien. Oye, sé que llevamos unas semanas distantes y quiero recompensarte, de verdad que quiero, por eso he decido que cuando todo esto acabe haremos lo que quieras. Todo un día juntos.

-... No te preocupes.

Y eso fue lo último que dijo. Por primera vez, mi corazón se sintió frágil. ¿Tanto mal había causado para que ni siquiera pudiera solucionarlo? Me levanté del asiento, oí como Marco me llamaba pero solo lo deje atrás. Yo no voy a ser la que te detenga a ti y a tus sentimientos.


Volví al hospital, cogí chocolate del la cafetería del hospital, fui a la habitación de Alicia. Ella y Jorge estaban dormidos. Toqué el hombro de Jorge. Él se levanto y me miro sorprendido.

-Oh Lu, eres tú... -Dijo mientras soltaba un bostezo-. Me quedé dormido, lo siento.

-No te preocupes, te traje un chocolate.

-Muchas gracias -Su expresión cambió de sorpresa a una linda sonrisa-. Es un detalle.

-No es nada, no es... Nada.

Me senté al lado de Jorge y apoyé la cabeza en su hombro. No lloré pero él sintió lo que pasaba y solo me acarició la cabeza. En ese momento despertó también Alicia.

-¿Va todo bien?

Levante la cabeza del hombro de Jorge y ambos asentimos. En ese momento apareció el doctor por la puerta. Dijo que en 3 días podría volver Alicia a su casa, solo necesitaba la firma de los padres y/o tutor legal. Al no saber nada de los padres vendría la madre de Jorge como Tutora legal. Era un gran alivio. Después de eso le pedí a Jorge que saliese conmigo al pasillo.

-¿Qué pasa Lu?

-Sh... Más bajo. Estaba pensando arreglar y decorar la casa de Alicia para cuando ella volviese, de verdad, el aspecto en el que se encuentra ahora no es el indicado para que ella vea al volver de un hospital.

-Tienes razón... -Se quedo callado unos momentos momentos y me miro a lo ojos-. Ya sé, puedo pedirle a mi tía que se quede aquí mientras nosotros limpiamos.

-¿No crees que eso puede extrañar a Alicia?

-No te preocupes, ya se me ocurrirá algo.


Amor de persona a persona.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora