Michael estaba escondido en el cuello de su novio, este lo tenía a sujetado muy fuertemente de su cintura, como si alguien en cualquier momento aparecería y se lo robarían de la nada.
Se encontraban acurrucados bajo las mantas de la cama Isaac. Habían faltado a clases porque era un día horrible y Michael dijo que preferiría estar en su casa acostado mirando películas. Y su novio le cumplió el deseo.
---¡por dios Mich eres un jodido muñeco de porcelana!---exclamo mientras acariciaba la suave piel de Luna bajo su sudadera.---podría vivir así tocando tu hermosa piel y apretándote todo.-
---pervertido.---respondió riendo con ganas Michael y mantenía una sonrisa de tonto enamorado.
---mm puedo sentir tu enorme sonrisa en mi cuelo ahora Luna.---soltó Isaac abrazándolo por debajo de su enorme sudadera.
Escucho pequeño ruido y unos labios fríos chocar contra su cuello.
Michael lo estaba besando.
---OH MADRE SANTA,ROMEO VAS A MATARME DE UN ATAQUE AL CORAZON,PARA YA.---exclamo con demasiada exageración entre risas.
Michael levanto su vista y pudo contemplar los ojos azules más hermoso del mundo.
---exageras-rió---
---te ves tan hermoso, con tú mejillas acaloradas y tu pelo revuelto...grrr---gruño---quiero comerte.
Y luego Isaac comenzó a morderlo por todas partes. Mejillas, nariz, labios, cuello.
Michael no se quejaba es mas no era consciente que sus labios estaban ensanchados en una enorme sonrisa, quizá estaba sonriendo incluso más grande que Lua cuando muestra todos sus dientes perlados.
Isaac se subió sobre su novio y pudo contemplar tanta belleza en el, que dudo si era real.
---eres tan perfecto que a veces me haces dudar de tu existencia.---dijo levantando la sudadera de Michael y repartiendo largos besos en su vientre plano y pálido.
---i...isaac-exclamó.---p-para.---se carcajeo.
Pero Mathew se encontraba succionando y mordiendo sus dulces caderas con desesperación. Cuando miro a Michael su risa había cesado y este se encontraba suspirando y apretando los ojos con fuerza, sus labios entreabiertos, secos, soltando suspiros.
De verdad quería comérselo.
---¿quieres que pare? Tu rostro parece dice que estas disfrutándolo.--- Contesto sonriente.
---ven aquí.---ordeno con lentitud.
Isaac trepo hacia su novio y se recostó sobre el haciendo que sus cuerpos choquen en cada mínimo toque.
---no hag-gas ess....---mich no pudo terminar con la frase cuando sintió a su novio moverse frenéticamente sobre su cuerpo.
Isaac parecía endemoniado y eso asustaba un poco a Luna.
Quizás demasiado.
Ataco sus labios con brusquedad y desesperación. Comenzó a sacarse la ropa y luego siguió con el pantalón chándal que le había prestado a Michael.
---isaac esto esta mmal.---murmuro mientras su novio succionaba nuevamente sus caderas.---¡AAH!-se escapo un pequeño gemido de sus labios y Mathew dio un brinco.
---¡cielo santo Mich! Si se te escapa otro de esos acabare ahora mismo.---hablo divertido.
Mich tapo su boca al instante con sus manos, pero después de un largo rato tratando de evitar soltar gemidos se dio por vencido y dejo escapar todas sus emociones.
---mmich.---se movía lenta y fuertemente Isaac entre las piernas de su novio .su cuerpo ardía y parecía desprender chispas.
Sus mejillas estaban hirviendo y sus rulos pegados en su cara de muñeco. Era perfecto y Luna no podía entender que hizo para merecer tanta belleza.
---bésame tonto.--- pidió Michael y eso hizo su novio. Lo beso con anhelo, devorando sus labios con demencia como si fuera la última vez que lo haría.
Por un momento sus respiraciones cesaron y Michael hablo.
---¿i...isaac?---lo detuvo y sus ojos chocaron con un azul furioso.
---¿qué amor?---soltó dando pequeños besos en la comisura de sus labios.
---tte...temm.---chispeo la lengua.---mierda.---murmuro.
Isaac solo lo miraba fijamente, resignado a esperar lo que sea que quería decirle Michael.
---¡teamo!---soltó casi en un grito con brusquedad.
Y un silencio lleno la habitación.
Pudo ver como los ojos de Mathew se llenaban de lágrimas en tan solo segundos y su labio inferior tembló.
---¿Qué pasa?---pregunto con miedo Michael .sintió pequeñas gotas de cristal caer sobre su rostro.
---Mich no sabes cuan agradecido estoy de haberte encontrado. Te amo, te amo, te amo te amo.---repetía mientras lloraba y reía repartiendo besos por todo el rostro de Luna.
Esa fue la primera vez que tuvo un momento íntimo con alguien.
Con Isaac.
La primera vez que expreso sus sentimientos.
A Isaac.
La primera vez que sonrió enormemente como Lua.
Por causa de Isaac
Y sobre todo la primera vez que sintió lo que era la felicidad.
Gracias a Isaac.
Octubre hizo magia.
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extra-ordinario.
Novela JuvenilMichael era un chico normal como todos, en realidad no tenía nada en absoluto que lo haga especial. O sí. Quizá él no sabía que todos los "chicos normales" no son callados, que no a todos les molestan las personas y sobre todo que no todos los chi...