Capítulo 11

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Maratón 2/3

- ¿Puedo saber como de la noche a la mañana decidiste querer salir a comer conmigo? - le preguntaba Micaela a Paio. 

Cuando Mica salió del colegio fue hasta donde habían acordado encontrarse y ahí él estaba esperándola en su auto, ella subió rápido con miedo que alguien los viera. La adrenalina hacía mucho más divertido y apasionante su salida.

Él condujo hasta un McDonald y después que sus pedidos estuvieran listos subieron al primer piso a sentarse a comer y charlar. 

- Bueno, ¿puedo confesarte algo? - le preguntó con complicidad él. 

- Obvio. Incluso si me confesas que mataste alguien, te cubro - bromeó ella mordiendo su cuarto de libra. 

- Desde que te conozco siempre quise invitarte a salir - reveló Paio causando un nuevo ataque de tos en la rubia. 

- Estoy bien, solo es un momento. - dijo ella tomando de su bebida y tratando de tranquilizarse, iba a tener que dominar sus nervios. - ¿Podes continuar? - Mica estaba muy interesada en lo que estaba diciendo Pablo y él sonrió. 

- Decía que siempre me interesaste Mica, solo que... tu hermano me mata si se entera que me acerqué a vos. 

- ¿Siempre te interese? - Mica estaba tratando de asimilar lo que él le estaba diciendo. Su amor platónico sentía lo mismo, tenía miedo que esto fuera un sueño. 

- ¿Mica no hay algo que quieras decirme? - dijo Paio sacando a Mica de su mundo. 

- ¿Algo? ¿Cómo qué? - preguntó confundida la rubia. 

- Estoy esperando que me confieses un secreto como yo acabo de hacerlo - insistió él. 

- Ah, sí - se dio cuenta Mica que no respondió a lo que él le había dicho y era lo que estaba esperando. - Bueno, quiero que sepas que lo que sentís, es recíproco. Y creo que ya lo sabías, no soy muy disimulada que digamos. -Paio sonrió un tanto satisfecho y un tanto decepcionado. 

- Mica, sé que nos gustamos. Tu declaración fue más una... confirmación. - Habló Paio. - No era lo que buscaba que me confieses, pero veo que no vas a contármelo. 

- ¿Contar qué? No entiendo Paio. - decía confusa Micaela. 

- Que ayer no saliste con tus amigas - afirmó él. - Sino, con Matt. - menos que Micaela no estaba comiendo ni bebiendo nada en ese momento porque lo hubiese escupido de la sorpresa, no sabía como Paio se había enterado de eso, solo sabía que le iba a traer problemas, una vez que todo iba a marchar bien, una ¿inocente? salida iba a perjudicar todo.



Entre el cielo y la tierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora