El viento azoteaba mi cabello violentamente, al igual que lo hacía con las ojas del pequeño árbol.
No oía un solo murmuro, hecho que me empujó a bajar de allí.
Tenía una sensación de soledad que no podía explicar. Necesitaba encontrar a Melanie. ¿Donde estaría?
Mis zapatos iban llenándose poco a poco de barro, hecho que me hizo correr rápidamente hacia el punto de partida. Sabía que, si quería sentirme infiltrada, necesitaba ser silenciosa e inteligente, al menos en aquel instante. Cuando pude distinguir a Emma, Lily, y Mery entre la débil luz del farol.
Seguí mi camino. Aunque, diferente. No había rastro de los chicos. Y tampoco de Melanie. Suspiré, y intenté pasar lo más desapercibida posible.
Me encontraba andando hacia algún lugar indeterminado. Ni si quiera yo era consciente de mis propios pasos o hechos, solo sabía que tenía que pasar como si fuera invisible.
El último rayo del farol se posaba en el descampado, iluminando un campo de hierbas verdes que destacaban con furor.
Aproveché la ocasión de que, nadie yacía allí. Me acerqué a las otras chicas que había localizado antes, suponiendo que estarían descalificadas por alguna razón.
—Hola. —Dije insegura, temiendo que en algún instante apareciera Harry.
Ellas me saludaron y me relataron su historia. Escuchaba atenta, sin perder un solo detalle. Habían sido vencidas por los chicos. Excepto Mery, que iba aliada con Harry y sus amigos, pero, por alguna razón desconocida, estaba allí.
Decidí contarles todo lo ocurrido.
Una sombra iba acercándose más y más y de entre la oscuridad apareció una figura femenina. Era Melanie.
Me asusté; pensaba que se trataba de nuestros contrincantes.
Entonces, oímos un par de susurros cerca, dándonos cuenta de que Harry y su equipo, ¡Estaba allí! Cojí palos, piñas e incluso pequeñas ojas que no servían para nada.
Ataqué, aunque temía que esta vez teníamos que afrontar el problema que acechaba. Esta vez era imposible escapar de nuevo. Para mí escapar con el arte de camuflarse entre las sombras es igual a refugiarse de la guerra. Antes que morir en aquellos juegos.
Y entonces me dieron séis veces, y sentí que no había la más mínima esperanza en ganar.
¿Quien ganó? Harry, el mismísimo Harry y su pandilla.
—Me tengo que ir. —Interrumpió Iris.
Lanzé una sonrisa tranquilizadora. Iris se tenía que ir. Me gustaría que se quedara, aunque eso no lo podía elegir yo.La despedimos con la mano, y desapareció al cruzar la calle.
Las demás pedimos revancha, esto no iba a quedar así. Fuimos a jugar al insituto, gracias a que, el padre de Lily era el conserje de allí, y tenía las llaves.
Nos adentramos en el enorme patio rodeado de pilares, y nos sentamos en círculo, manteniendo una conversación que duró unos diez minutos. Cuando ésta finalizó, volvimos a contar la cuenta atrás.
—¡Ya! —Gritó alguna chica que no pude ver con certeza, pero que no me preocupó. Heché a correr, pero no sin antes aliarme con Melanie. Más tarde nos aliamos con Lily y Emma.
Sabía que aquel terreno era totalmente distinto al anterior; Este era un instituto, lleno de inventos y poca naturaleza, al contrario que en el descampado.
Hechamos a correr. La partida había empezado, y yo miraba la hora con preocupación; no quería que esta tarde acabara.
ESTÁS LEYENDO
Desde mis ojos {TERMINADA}
RandomLa adolescencia, era una etapa difícil, posiblemente fuera una cárcel para mí. Cada momento, significaba para mí algo más de lo que preocuparme. Creedme; Huíd si estáis a tiempo. Huid de la rutina que os rodea, de algo que, posiblemente, te esté dan...