Juntos

61 3 0
                                        

Se habían pasado la tarde después de aquel buen rato vestidos y sentados de manera muy correcta cada uno en un sofá del salón de la impecable casa de Luna. Se suponía que los padres de ella deberían llegar pronto y no podían estar de cualquier manera; tenía que parecer que no habían follado horas antes y que de hecho, no pensaban hacerlo hasta dentro de muchisimo tiempo.
Esto duró hasta que Luna recibió una llamada a el móvil; era su padre, que le comentaba que esa noche iban a dormir en una casa que tenían a las afueras de la ciudad vecina, en un pequeño claro cerca de un lago donde habían pasado los dos veranos que llevaban saliendo (ahora era invierno, pero igualmente el lugar se cubria de nieve y los padres de Luna eran amantes de las vistas bucólicas. Además, querrian algo de intimidad, suponían).
Invitaron a Luna quien alegó tener que estudiar, mientras que Rolo llamaba a su madre a el mismo tiempo diciendole que esa noche iba a dormir en casa de un amigo; ella no hizo preguntas siquiera: eso podía ser tan buen como malo, pero por ahora no importaba en absoluto: Iban a dormir juntos.

Las siguientes horas antes de acostarse fueron unas horas llenas de cariño y calidez corporal; en aquel frio invierno se agradecía tener a alguien a quien poder abrazar mientras uno veia la tele o jugaba al ordenador.

Pero la verdad es que de haber sabido que aquella era la última noche en la que Rolo iba a poder besar, cuidar o abrazar a Luna; habría aprovechado mas el tiempo con ella.

Llegó la noche y se acostaron juntos por última vez.

Vulnus: El DescensoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora