❁ ❀ ten ❀ ❁

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Michael.

Noté como alguien me abrazaba al despertar, me estiré un poco golpeando la cara de ese alguien, y provocando que despertara. Éxito Michael.

— ¡¿Oye que te pasa?! — Luke. — ¡Intento hacerme el lindo contigo y me golpeas? — hizo un puchero mientras pasaba su mano por su mejilla.

— Lo siento, no quería golpearte — me senté en la cama y lo mire.— ¿Me ayudarás a enterrar al gatito?

El asintió y murmuró:

— Ya huele a muerto aquí, haremos una limpieza profunda — Luke hizo una mueca de disgusto. Solté una pequeña carcajada.

— Me duele la pancita — hice un puchero. Luke se acercó a mí.

— ¿Has comido algo? — acaricio mi mejilla. Yo asentí — Bien, acuéstate, yo iré a ver lo de tu gato y volveré contigo — sonreí inconscientemente ante sus actos.—, abre las ventanas, ya vuelvo.

El tomó el pequeño pañuelo con cuidado y salió de la habitación, obedecí a su orden y abrí las ventanas, me acurruqué nuevamente en la cama y me abrace a mí mismo soltando un suspiro.

Varios minutos después Luke volvió, sonrío al verme y se acostó a mi lado sin decir ni una palabra, me abrazo y me apego a su cuerpo. Apoye mi cabeza en su pecho y suspire.

Luke se separó y tomo mi rostro con ambas manos.

— No quiero que hables de esto nunca más. — el susurro. Yo asentí pensando que era sobre lo que hacía por mi, pero me equivoque.

Él hizo desaparecer la poca distancia que había entre nosotros y unió nuestros labios, al principio me fue difícil reaccionar, pero luego correspondí al beso con algo de torpeza al beso. Cerré mis ojos. Pase mis brazos por alrededor de su cuello, pero el sentirme observado me hizo abrirlos de nuevo, mire hacia la puerta. Mierda.

— Luke, basta — lo aleje de mi, el imito mi acción mirando a la puerta.

— Sara. — el rápidamente se levanto y corrió hacia la puerta, persiguiendo a la chica quien solo corría de El.

Mierda, mierda, y más mierda.

Luke.

— Sara escúchame por favor — suplique y tome su mano.

— Escúchame tú a mí.— dijo enojada.— Solo espero que a Michael no le hagas esto. Él es un gran chico, y no tienes idea de lo enamorado que está de ti. No le hagas nada, alguien como tú puede matarlo con solo tocarlo.

Me quedé paralizado al escuchar sus palabras. Ella solo se limitó a salir de mi casa, sin decir ni una palabra más.

Mordí mi labio y subí rápidamente a la habitación, y vi lo que esperaba, se encontraba llorando, abrazándose a sí mismo. Suspire con tristeza y me acerqué a él. Lo abrace y permanecí en silencio, escuchando sus sollozos y lamentos.

— ¿Ya no son novios? — levanto la cabeza y me miró luego de varios minutos. Yo negué con la cabeza, él me abrazo.— lo siento mucho, fue mi culpa, tú la querías y yo me puse en medio —sollozo.

— Michael no te culpes, no fue tu culpa, yo te bese a ti — acaricie su cabello intentando calmarlo.

El asintió y suspiro.

— No quiero que te sientas mal por esto — susurre y lo abrace con fuerza. No obtuve respuesta por su parte.

Seguía pensando en lo que Sara me había dicho, ¿Michael enamorado de mi? Esto no podía ser.

— Luke... ¿Me besaste por placer o por qué te di pena? — Michael alzó la mirada y la fijo en mis ojos.

Por placer.

(...)

— ¿Sabes la confusión que estoy viviendo ahora mismo? — mire a los dos chicos, quienes me miraban haciendo muecas.

— Pero la pregunta es, ¿a ti te gusta? — Peter levantó una ceja

— ¡NO LO SÉ! — exclamé, haciendo que gran parte de la gente que pasaba por el lugar volteara a mirarnos.— Sabes que Michael ha sido mi amigo desde hace años, pero ahora viene con que está enamorado de mí y no lo sé, estoy mal, me va a dar algo.— mordí mis uñas y simule hacer un abanico con mi mano.

— Christopher y yo éramos mejores amigos, y ahora míranos, estamos saliendo hace más de dos años, y prometimos que por sobre todas las cosas, siempre íbamos a hacer amigos, no importaba si nos casamos, si tenemos bebés, nada, siempre seremos amigos — el pequeño asintió y abrace a su novio.

— Es, hace unos meses atrás yo traté muy mal a Michael y no sé qué hace que el se enamore de mi — mordí mi labio.

— Luke ya deja de hacer eso, tú labio va a explotar — el pequeño murmuro.

— Es que estoy nervioso — suspire.

— Pero debes superar ese nerviosismo, debes enfrentarte a las cosas, no se van a solucionar solo si te muerdes el labio y pides consejos, tú lo provocaste, tú lo solucionas, tú aclaras las cosas, no está mal pedir consejos, pero quien debe enfrentarse al desafío, eres tú, nadie más.

Suspire y asentí. Tenía razón, yo debía aclararle las cosas a Michael. Bien, que comience el recorrido por el camino difícil.

❁ cats  ❁  muke Donde viven las historias. Descúbrelo ahora