CAPÍTULO 25

34 2 0
                                    

Con sólo entre abrir las puertas de Dreamer, ya se podía oír la música a todo volumen y la comida que salía del poblado se podía oler desde aquí mismo.

Alex, mis padres, mis amigos y yo dimos un paso para entrar todos, y nos quedamos ahí.

Cuando la puerta se cerró, mi madre y yo cerramos los ojos.

Diez minutos después, ya estábamos todos vestidos con trajes para los chicos y vestidos para las chicas, y nos pusimos de camino al poblado.

Yo iba delante, con un vestido morado muy oscuro un poco apretado de cintura para arriba y totalmente suelto de cintura para abajo y unas Converse a juego. A mi lado estaba Nicole, con un vestido ajustado de color negro que le llegaba unos 10 centímetros por encima de la rodilla y unos tacones negros que manejaba con mucha soltura. Qué envidia.

Detrás nuestro estaban mis padres. Ella iba con un vestido lila suelto por todas partes aunque un poco ajustado por el pecho y con una sola manga y unas sandalias con un poco de tacón, y él iba con un traje azul muy oscuro y una camisa más clara, sin corbata.

Los últimos eran Johnny y Alex. Éste iba con un traje negro sin la americana y unas Converse del mismo color, mientras que Johnny iba con unos vaqueros negros sujetados por un cinturón del mismo color, una camisa a cuadros blanca y negra y una americana negra, junto con una corbata del mismo color. Estaba bastante mono, había que admitir.

Más tarde, cuando estábamos caminando hacia la fiesta, le dije a Nicole lo de Johnny.

- Ya lo sabía.

- ¿Cómo? ¿Que lo sabías?

- Sí. ¿Te acuerdas del día que te dije que estaba enfadado y tú te fuiste con Julie?

- Sí...

- Pues ese día me lo dijo.

- Vaya... - miré hacia abajo.

- ¿Te pasa algo?

- Es que... Ésta mañana, cuando hablé con Alex y me dio su consejo... Me hizo pensar - miré a mi amiga -. ¿Y si me gusta Johnny?

- ¿Qué? Tía, dime que estás de coña.

- Ojalá. Es que... Él ha sido mi amigo durante años, y no le he imaginado como nada más hasta ahora.

- Sam, te voy a decir algo: vamos a ir a una fiesta, y tu novio estará ahí. Está enamorado de ti, y es demasiado buen portento como para que pienses en otros. Mira, te propongo una cosa: estate con él todo el tiempo que puedas, y ya verás como te olvidas de Johnny.

- Bueno... Parece buena idea.

- ¡Porque lo es! Es que soy más buena dando consejos... - las dos nos reímos, y ella me envolvió con el brazo.

Cuando llegamos, nos fue inevitable asombrarnos; al pasar las calles, se podía llegar a una plaza llena totalmente de luces de colores, con farolas iluminándolo todo. En cada boca de calle, excepto por la que entramos, había una barra para beber lo que quisiéramos, una música sorprendentemente actual amenizaba el ambiente, y todo el suelo estaba pintado con sinalefas preciosas. En el medio estaba la fuente llena de agua tan cristalina que parecía que brillaba.

Nicole, Johnny, Alex y yo nos unimos al grupo de gente de nuestra edad (véase desde Steven hasta Jessie) y nos pusimos a bailar.

En cuanto crucé miradas con Will, una sonrisa apareció por mis labios y el consejo de Nicole me vino a la cabeza: "Estate con él todo el tiempo que puedas, y ya verás cómo te olvidas de Johnny", así que me acerqué a él y le di un enorme abrazo, que correspondió y concluyó con un beso en la mejilla.

Fuimos a una de las barras y nos sentamos en unos taburetes mientras el camarero nos preparaba una mezcla de refrescos varios.

- Felicidades, Sam - dijo Will

- Igualmente.

Nos miramos a los ojos, hasta que interrumpió el contacto mirando a su bolsillo para sacar una cosa; una cajita pequeñita.

- No se cumplen 17 todos los años - rió.

- Oh, Will, no debiste...

- Ábrelo.

Lo abrí y vi lo más bonito que pude ver: una cadena de oro con un corazón colgando de ella, y en él estaban nuestras iniciales.

- Oh, Will... - no me salían las palabras, era el regalo más bonito que me pudieran hacer.

- No digas nada. Gírate.

Hice lo que me dijo, y puso sus brazos alrededor de mi cuello mientras me ponía el pelo a un lado. Enrolló con la cadena mi cuello y me la ató.

Cuando me giré, pude observar cómo sus azules y profundos ojos me estaban mirando con un brillo especial.

- Cuando te quiten los aparatos, no te dejaré en paz.

Me reí y, seguidamente, el camarero puso las bebidas en la barra. Las cogimos y fuimos con el resto para ir a bailar.

Observé el panorama: Nicole estaba a un lado y miraba a Alex todo el rato, James y Jessie bailaban como locos enamorados (ya sabía por qué James quería crecer: quería pasar su vida con Jessie), Steven, Lucy, Peter y Johnny bailaban muy enérgicamente, y Katherine estaba sentada a un lado quieta y con cara de aburrimiento, así que me acerqué.

- ¿Qué pasa Kath, no te diviertes?

- Las fiestas no son lo mío.

- Vaya... ¿Y por qué no te vas a tu casa?

- Me gusta ver la fuente en el Gran Momento

- ¿Quieres decir cuando nace un niño?

- Más bien cuando se va el mayor de todos.

- Ah... - la tensión invadió el ambiente repentinamente.

- Está a punto de empezar. ¿Quieres venir a verlo?

- Claro.

Nos acercamos a la fuente, que brillaba más que antes, a la vez que la música se apagaba y la gente se acumulaba alrededor del agua.

***

¡Holi, soñadores!

¿Queréis ver qué pasa? ¡Pues esperad al siguiente capítulo!

¿De qué equipo sois, del #TeamWill o del #TeamJohnny?

Ni si quiera lo tengo del todo decidido, así que...

¡1100! ¡1100 visitas! Estoy que no quepo en , en serio. Gracias. ¡A ver si llegamos a las 2K!

Cariñosa y decidiendoteammente,

Kuricris

PD:

Twitter:

@KuricrisDreamer

Dreamer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora