DRAKON IN LOVE

CAPÍTULO 20

 Jungkook PVO

Me dirigí a preparar el desayuno mientras Jimin se duchaba, no podía parar de reír, el verlo así de avergonzado era lo mejor, entretanto preparaba el desayuno me dio un poco de nostalgia hace cuanto que no preparaba algo para Jimin. ¿Qué es lo que pasara ahora?

— Mocoso, tú también me gustas- recordar sus palabras lograban que un sonrisa iluminase mi rostro, llevé mis manos a mi rostro, cubriendo mi sonrisa.

— ¿Por qué estás tan sonrojado mocoso?- oí aquellas palabras sintiendo como Jimin me rodeaba con sus brazos la cintura, me sonroje aún más, su pecho era tan cálido, me sentía tan seguro a su lado.

— Es raro.- susurré, pero él lo escucho claro, deposito su cabeza en mi hombro para luego susurrarme cerca de la oreja.

— ¿Qué es raro?- todo esto es raro, lo que yo sentía por él era raro, nunca pensé que me gustaría una persona como Jimin, después de todo lo único que hacíamos era pelear, pero ahora siento que si no estoy con el mi vida ya no tiene sentido.

Puede que suene exagerado o que es muy apresurado para sentir eso por él, pero no lo puedo evitar, después de todo cuando estuve a punto de morir o cuando casi me violaron lo único que tenía en mi mente era ver a Jimin, lo único que deseaba en esos momentos es que Jimin estuviera conmigo que no me dejase, deseaba que hiciese cualquier cosa para molestarme, pero que estuviera conmigo.

— Todo es raro, esto que estamos haciendo ahora es raro.- susurré, Jimin fue soltando su agarre, inmediato llevé mis manos a las suyas evitando que se separase de mí.

— No quiero que me sueltes.- giré mi cuerpo rodeando su cintura con mis manos, aprovechando de hundir mi rostro en su pecho, adoraba sentir su cálido pecho, su olor era tan exquisito que me dejaba hipnotizado.

— Dije que era raro, pero no lo dije para que me soltaras, no quiero que me sueltes, no quiero que te alejes de mí.- murmuré disfrutando de la calidez que proporcionaba sus brazos alrededor de mi cuerpo, mi piel se erizó al sentir su nariz pasear por mi cuello inspirando levemente, ¿cómo no me di cuenta de esto que teníamos? ¿Cómo se explica en palabras lo que siento?

— Para mí también es raro, jamás me había preocupado por una persona que ni siquiera conocía, pero mocoso, cambiaste mi vida. Nunca me había arrepentido tanto de las cosas que había hecho, pero cuando te secuestraron todo vino a mi mente, el pensar que te podrían hacer lo mismo que yo hice, me volvía loco, yo no te podía perder...- susurró en mi cuello.

— No podía perder a la única persona que logre querer incluso con todo el odio de mi corazón, tú lograste encontrar un lugar muy grande en ese lugar que creí muerto, te anclaste y no te soltaste, ahora te llevo muy pegado a mí, mi corazón te lleva, mi mente no deja de pensarte, mis manos ansían tocarte, mis ojos ansían verte siempre y mis labios quieren besarte, mimarte decirte lo importante que eres para mí.- mi corazón palpitó con intensidad, sentí el cuerpo de Jimin temblar, sé que esto es difícil para él, porque para mí también lo es, nunca me había sentido de esa manera, nunca había sentido tanto cariño ni apego por una persona.

— Me tienes a tu disposición mocoso, puedes hacer conmigo lo que quieras y eso es lo que me da miedo...- lentamente me separé de él, llevé mis manos a su mejilla acariciándolas suavemente, Jimin cerró sus ojos disfrutando de mi tacto, sonreí mientras guiaba mis manos a su cuello acercándole a mí.

— El único que puede hacer conmigo lo que quiera eres tú, cautivaste a mi corazón, todo mi ser te necesita, te quiero mucho más que a mi propia existencia, sé que para ambos es difícil, porque a ambos nos tocó una vida difícil, pero de ahora en adelante jamás estarás solo, Jimin yo no quiero alejarme de ti, no me dejes nunca...- Jimin se acercó aún más a mi cuerpo, pegó su frente con la mía respirando profundamente.