DRAKON IN LOVE

CAPÍTULO 21

 Jungkook PVO

Los sueños mantenían mi ser completamente dormido, era placentero estar en aquel lugar, lentamente fui siendo consiente al sentir la cama hundirse, todas mis alertar se activaron, mi corazón palpitó con fuerza, sentí mi cuerpo paralizarse ante unos brazos rodearme. Mis ojos fueron abriéndose asustado.

—Tranquilo pequeño soy yo.- mi cuerpo se tranquilizó de inmediato al oír aquella voz, mis ojos volvieron a cerrarse, sonreí al sentir una calidez posarse en mi frente. Moví mi cuerpo acercándome aún más a él, envolví mis brazos en su cintura hundiendo mi rostro en su cálido pecho, su olor inundo mis fosas nasales enviándome nuevamente al mundo de los sueños...

— Mocoso no sabes en el problema que me metí, pero no importa, tú eres lo único importante que tengo ahora, y juro que te protegeré con mi vida si es necesario.- una pequeña voz se oía dentro de mí, no entendía si aquello era parte de mí mente o era Jimin, intenté despertar dejándome caer nuevamente bajo su delicado tacto.

Mi ser se sentía inquieto, algo no iba bien, mi corazón seguía inquieto, y aun bajo el cansancio intentaba acercarme más a Jimin, deseaba que estuviese bien, ha hecho tanto por mí, deseo poder retribuirle y ayudarle a que se sienta mejor.

— ¿Kookie, cómo hago para no dañarte? te necesito tanto- su voz cada vez se sentía más cerca, una presión acarició mis labios, fue algo débil, un ligero cosquilleo atacó la zona donde la calidez se ramificaba gracias a sus labios.

Intenté abrir mis ojos, pero pesaban demasiado, mi cuerpo se estremeció al sentir algo húmedo rozar mi cuello, consiguiendo que todas mis alertas se activaran, mis ojos se abrieron de inmediato encontrándome con los oscuros ojos de Jimin, pasé saliva inquieto, comencé a bajar mi vista topándome con su cuerpo desnudo, cubriendo su intimidad solo con bóxer.

Mi vista quedó automáticamente pegada en su torso, especialmente en su costilla al ver el tatuaje que se encontraba en ella, mis manos cosquillearon por acariciar aquella pieza de arte, alcé mi mano permitiendo que mis dedos delineasen su contorno, un pequeño jadeo se escapó de los labios de Jimin.

— Jungkook...- mi nombre sonó de una manera distinta, su voz era ronca y profunda, la cual provocó que mi cuerpo se estremeciese, volví a alzar mi mirada siendo atrapada por los ojos de Jimin, me quedé un tanto perdido ante aquella vista, conocía perfectamente sus ojos, y me sorprendí al ver en ellos duda, miedo, desesperación y un deseo abrazador.

— ¿Jimin, qué ocurre?- susurré, sus ojos se cerraron de inmediato, absorbiendo cada palabra dicha, Jimin no volvió a hablar tan solo abrió sus ojos posándolos en los míos, sentí que mi respiración se detenía al verle morder sus labios con fuerza, una pequeña maldición se escapó de sus labios antes de que atacase los míos con furia, en un beso desesperado.

No me dio tiempo de poder responderle aquel beso, se separó de mí, bajando con sus labios por mi cuello, sentí mi piel erizarse bajo su tacto, todo lugar donde Jimin rozaba parecía arder, negué con mi cabeza negándome a aquellas sensaciones, sentí pequeñas descargas de placer atacar mi cuerpo, sintiendo su lengua lamer mi torso, mordí mi labio evitando emitir algún sonido extraño, podía sentir mi rostro sonrojado, mi respiración era cada vez más irregular, intenté separarme, pero no podía, Jimin no era así, no deseo esto.

— J-Jimin detente, Aghm...- un jadeo se escapó de mis labios al sentir como sus dientes atrapaban uno de mis pezones, mi espalda se arqueo y una ola de placer me envolvió, Jimin se subió a horcajadas sobre mí, terminando de quitarme la camiseta de manera desesperada, lo mismo ocurrió con mis pantalones, mi corazón palpitada con mayor fuerza.