¡Estamos perdidos!

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Al final, resultó ser Bigotes, que luchaba por salir de un seto en el que se había enredado. Sus hermanos le ayudaron a salir y siguieron buscando.

Después, vieron una colita asomando de una alcantarilla. La abrieron y encontraron a Peludín empapada. Les contó que se había caído a una alcantarilla porque la mochila de Sara tenia un agujero.

-¡Mira mi pelo! ¡Estoy horrible! -Peludin se negó a dar un paso hasta secarse y estar guapo. Perdieron media hora.

Nieve estaba en la copa de un árbol. Se intentó escapar por la ventana del segundo piso, pero no se acordó de su miedo a las alturas. Sus hermanos hicieron una escalera de cajas y bajó por allí.

Faltaba Bolita. Esta se había escapado sola; la muy especialita trepó por la chimenea, bajó por un árbol y esperaba a sus hermanos en el jardín delantero.

Los 8, juntos otra vez, decidieron volver al bosque.

-Y...¿dónde está el bosque exactamente? -preguntó Bola de nieve.

Los gatitos se miraron entre si y gritaron:

-¡Estamos perdidos!

Los 8 gatitos perdidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora