Cap 5

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- Muy bien niños, hoy fue un largo día y mi hermano y yo tenemos mucho de que hablar, así que mejor váyanse a acostar. 

-¿Qué? P-Pero... ¡es el autor de los diarios! ¡He estado esperando esto por todo el verano!

-¡He dicho que a dormir!

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Ambos se encontraban frente al espejo en un silencio incómodo.

-Miranos, ¿Cuando nos convertimos en ancianos? - hablo Stanley para romper el hielo.

Stanford río ante la ocurrencia de su gemelo.

- Te pareces a Papá. - soltó de repente para molestarlo.

-¿He? No digas eso.

Ambos gemelos rieron. Por un momento olvidaron todo lo malo que había pasado, era como volver a los viejos tiempos.

Pero Stanford regreso a la realidad.

-De acuerdo Stanley este es el trato, te puedes quedar lo que resta del verano para cuidar a los niños, yo me quedare en el sótano para poder contener todos los daños que causamos.

Pero al acabar el verano me devuelves mi casa, me devuelves mi nombre, y esta basura de la cabaña del misterio se acaba, ¿Entendido? 》

El otro lo miro enojado, en sus ojos se podía ver tristeza pura.

¿Cómo fue tan tonto para creer que Stanford lo iba a perdonar tan fácil?

- Nunca vas a agradecerme ¿cierto?

Recibió una mirada de odio por parte de su hermano, como si para Stanford el ya no existiera.

"Muy bien, esto se puede jugar de dos"

- Bien, pero con una condición, -se acercó a el - aléjate de los niños no quiero que corran peligro.

《Por lo que a mi concierna, ellos son la única familia que me queda.》

Azotó la puerta con fuerza.

Se recargo en la antes mencionada mientras recuperaba el aliento que había perdido mientras huía de la cabra -de ahora 10 metros de altura- que alguna vez fue su mascota.

Cuando su respiración volvió a la normalidad, se dirigió a la ventana para ver que demonios pasaba.

Lo que encontró no fue muy agradable, había fuego por todas partes, algunos seres en forma ojos con alas que le permitían volar, y como último detalle, un ente triangular de un solo ojo.

Se quedó mudo por un instante, no creía lo que veía, ¡era simplemente ilógico! ¡Era como las tonterías que decía Dipper...!

Un momento...

¡Los niños!

Salió corriendo hacia las escaleras. Subía los escalones en dos en dos, aveces hasta en tres. No importaba si se llegaba a caer, necesitaba verlos, saber que se encontraban bien.

Nada.

Asustado, empezó a buscar en toda la casa, siempre gritando sus nombres al aire, en algunas ocasiones llegó a gritar el nombre de su gemelo. Pero siempre era lo mismo, nadie respondía.

Ya con un miedo más grande, salio de la casa en busca de sus sobrinos.

-¡Dipper! ¡Mabel! ¡Stanford! ¡Alguien...!

Llegó al pueblo, encontrándose con toda la gente gritando. Se abrió paso entre la gente que parecía un mar.

Choco con alguien relativamente bajo. Dirigió su mirada hacia abajo, encontrándose con una chica de lentes, cabello oscuro.

Un clic hizo que en su memoria recordará quien era, era amiga de Mabel.

-¿Señor Pines?

(...)

Corría desesperado.

Llevaba ya dos días buscando a sus sobrinos y no encontraba nada.
La cabaña del misterio se había convertido en un lugar donde albergaba a los humanos que el había encontrado.

Un claro ejemplo eran las amigas de Mabel, las cuales había encontrado al principio de todo esto.

Con el tiempo se fueron agregando más personas, la rubia oxigenada, el loco del pájaro carpintero, un bravucón, etcétera.

Pero también habían criaturas raras, un oso con muchas caras, un unicornio presumido, ¡Incluso un personaje de video juegos!

Giro a la izquierda, adentrándose a un callejón con bolsas de basura.

Un ruido lo asustó. Se acercó lentamente a las bolsas, dispuesto a golpear lo que sea que haya hay.

- ¡Por favor, no me hagas nada!

De entre las bolsas salió Fidleford, cubriéndose la cara con miedo.

(...)

- gracias... - murmuró escondiendo su cara en la espalda de Stanley.

- Ni que lo digas...

Y muy en el fondo el sabia que debía de encontrar lo más pronto posible a sus sobrinos y a su estúpido hermano.

"Oh dios, no he encontrado a Pato..."

Hola, se que me tarde, pero aquí está su capítulo nuevo.

Que les digo, la historia no le cálculo que tenga otros 4 o 5 capítulos, ya que va a ser muuuuy corta.

En fin, espero que les haya gustado.

Atte: Shey_menma.

¡Tu gemelo se robo a mi gemelo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora