¡Tu gemelo se robo a mi gemelo!

Cap 6

Los gritos infantiles llenaban el lugar.

-¡Date prisa cerebrito!

Stan río, su hermano era demasiado lento a su parecer

-¡No vallas tan rápido Stanley! - rogó, intentado recuperar el aire. Pero no lo escucho, siguió corriendo - ¡Esperame!

La atmósfera cambio repentinamente, ya no era un niño, ahora tenía 14 años.

Frente a el se encontraba Stan en el peor estado posible.

- ¡Dios Stanley! ¿Qué te sucedido? - grito, mientras ayudaba a que el se recostara en el sillón - Quédate aquí, iré por el botiquín.

Con rapidez se dirigió a la cocina, hay se encontraba el botiquín debajo de un estante.

- ¿S-Stanford?

Volteo hacia la sala, su rostro reflejaba culpabilidad, era su culpa.

Camino a paso ligero hasta el. Se sentó en una silla que estaba cerca mientras empezaba a humedecer el algodón con alcohol.

- Stanford, yo...

- No digas nada - corto la oración de su gemelo mientras empezaba a desinfectar las heridas. Sintió como se removía, incómodo ante el dolor. - No te muevas, será peor -

Miro a su gemelo, tenia múltiples golpes por todo su cuerpo.

Soltó una maldición por lo bajo.

Un repentino enojo se empezó a formar en el fondo de su corazón.

¡Estúpido trabajo de Ciencias!

¡Estúpidos bravucones!

¡Estúpido Stan por defenderlo y recibir cada golpe que debieron ser para el!

¡Estúpido el por no poder defenderse!

Inconscientemente, empezó a apretar con fuerza el algodón en la cara de su hermano.

¡Se supone que el era el hermano mayor, el debía cuidar del menor!

- ¡Auch!

Al escuchar el quejido de su hermano se dio cuenta, estaba restregandole el algodón con tal fuerza, que en vez de ayudarlo, lo dañaba más.

- ¡L-Lo siento! - grito, al darse cuenta del daño hacia su gemelo
- ¡Fue un accidente, lo juro! - Stan movió la mano, en señal de que no se preocupara.

La curación siguió en un silencio incómodo para ambos.

Stanley tomó la palabra.

- Se que dijiste que no me metiera Ford, ¡Pero no podía soportar como ellos te golpeaban! - apretó con fuerza sus manos, tanto que sus nudillos se volvieron blancos por la presión - ¡Eres mi hermano, por eso yo...!

Se callo de inmediato al ver como unas lágrimas surcaban por las mejillas de su hermano.

- Ford, yo...

- Eres un idiota... - susurro - ¿Qué hubiera pasado si perdías más sangre? ¡Pudiste haber parado en el hospital! - grito en medio del llanto - Dime, ¿Qué haría yo sin ti cabeza hueca?

Sin esperar la respuesta, se aventó a los brazos de su hermano, abrazandolo como si la vida dependiera de ello.

En medio de ese abrazo, empezó a sentir como el cuerpo de su hermano se sentía más pesado, "Habrá quedado inconsistente" pensó, pero cuando levantó su cabeza para verlo se paralizó, "Está frío..." de inmediato llevo su mano a su cuello, en busca de pulso.

Nada.

No podía sentirlo.

Desesperado, colocó su oído en su pecho, en busca del latido de su corazón.

Lamentablemente, el resultado fue el mismo.

- N-No... ¡Dios no! - empezó a agitar el cuerpo de su hermano, esperando que reaccionará - ¡Stan, no me hagas esto! - lo colocó en el sillón, luego puso sus manos en su pecho, mientras intentaba reanimarlo - ¡Lo prometiste! - grito en medio del llanto - ¡Prometiste que siempre estarías para mi!

Derrepente, todo a su alrededor se volvió negro

"¿Pero que demonios...?"

Escucho una risa ensordecedora, asustado miro el cuerpo de su hermano, quien se empezaba a volver polvo.

- ¡No! - grito desesperado, mientras intentaba agarrar lo que quedaba de su gemelo, pero fue inútil, sus manos atravesaban el cuerpo. Solo en ese momento pudo ver sus manos, ya no eran jóvenes, ahora estaban arrugadas - ¿Qué está pasando?

Vaya hermano resultante ser.

- Esa voz... ¿Stanley?

¡Te interesa más tus misterios que tu propia familia!

- ¡No es cierto! - grito al aire - Eso... ¡Eso no es verdad!

Bien, pero con una condición, ¡Aléjate de los niños no quiero que corran peligro!

- ¿Niños? ¿Cuales niños?

Ya que, por lo que a mi concierna, ellos son la única familia que me queda.

El estruendoso sonido de aquella risa se hizo más fuerte, asustandolo.

- Vaya, vaya, ¿Quien diría que aún quieres a tu hermano?

- ¡¿Quien eres?!

- Qué maleducado eres Forsdy, pero bueno, ya es hora de que despiertes Sixer.

Nota:

Se que me tarde, pero la mayoría de mi tiempo fue absorbido por una traducción (la cual acabo de publicar, llamada Relativity falls, un AU), más sumándole el estudio para el examen de la prepa.

Soy feliz de informar que ya, están completos los one-shot prometidos, el libro está en mi perfil por lo que si gustan pueden leerlos.

Atte:Shey_menma