Erai culiáo |chilensis|

VII

Me desperté como las hueás.No dormí casi en toda la noche, pensando en la maracata y sus hueas, mas encima día lunes.

JORNADA COMPLETA, AGH.

Heché sus wenas chuchas y me levanté.

Fuí al baño,me lavé los dientes,las presas y toda la hueá.

Mi mamá estaba enojá por lo de ayer, y no me planchó la falda la culiá, así que la tuve que planchar yo no más.

Me puse la huea de uniforme, agarré mi mochila y me fuí al comedor, ni me arreglé.Niaí con la huea.

Si, para mi todo es hueá.

Ahí estaba mi mamá sentá con las manos en la taza.

--Buenos días--me dijo mirando su café.

--Para tí serán buenos--dije peinandome.

Me miró raro.

--¿Y que pasó con la niña positiva?--preguntó.

--No está, hoy se quedó dormida--respondí de mala gana.

--Al menos toma desayuno,para que te suba el animo--me miró fijo.

--No quiero, ya me voy--Me puse la mochila.

--¿Tan temprano?--preguntó extrañada.

--Si,quiero caminar--dije media aburría.

No estaba enojá, pero estaba chata, y no se cuál es peor.

En el camino puse musica movía, pa motivarme.

Llegé al colegio y lo primero que hize fué ir al baño.

Estaba que me meaba.

Me miré al espejo, y pensé:

"Tss,presta la carita pa ir a pedir pega. Teni las medias ojeras Belén culiá. Debería arreglarme un poqui...ah,pico".

Caminé hacia mi sala y pasé por el pasillo, no había nadie, baia baia.

Entré a la huea y lo que ví me hizo estresarme aún más.

La coni y el rucio, si.

La hueona tenía perso, y sida.

Dejé mi mochila en la mesa y me viré a la banca, agarré mi celu, los audifonos,me puse la capucha y a la chucha.

--Hola--escuché a la pelirroja.

Levanté la cabeza en señal de saludo.

--¿Que pasó?--me sacó un audifono.

--Na po--la miré.

--Estai rara hueon--me miró fijamente.

--No pasa na ¿Entremos?--pregunté.

No quería ver a la cata, ni al bastian, ni al pipe, ni a niun culiao.

Asintió con la cabeza y entrámos.

Llegó el profe de historia y nos contó hueas de su clase y de su vida.

Estaba mas aburría que la chucha,pero al menos era mejor que hacer algo.

--Ya ahora si, cuenta--me susurró.

--¿Que hueá estay hablando?--levanté una ceja.

--Lo que te pasó po, yo no soy hueona--sonrió.

Creo que la amo.

--A la maraca de la cata le dió un ataque de nervios por mi culpa--la solté de una.

--¡QUE!--gritó. Creo que la escuchó todo el curso hueon.