Capítulo 3

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"¿Qué es lo que decimos cuando callamos? ¿Qué palabras se pierden en la nada sin saber a dónde ir? Muchas veces creemos que por callar le hacemos un bien a alguien, creemos que esas palabras que se quedan atravesadas en la garganta, son menos dolorosas cuando se esconden que cuando salen a la luz. Es cómo si pretendiéramos que cerrando las ventanas impidiéramos que la luz del día se extinga. Callar no es mas que una forma de expresar miedo indirectamente. Miedo a lastimar, miedo al ridículo, miedo al que dirán, miedo a ser tomados en cuenta para algo que no podamos afrontar. Callar puede ser un gran beneficio para el otro, para no lastimar o para no incomodar, pero también puede ser un gran síntoma de falta de amor propio, falta de interés por uno mismo, que solo se auto destruye en silencio, tragando todas esas palabras que quiere decir pero que no se anima."

Entreabrió los ojos y la luz pareció quemar sus pupilas. Volvió a cerrarlos con fuerza. Sintió que su mente iba a explotar. Como si un tambor resonara con rudeza en su cabeza. Se convenció de que debía otra vez abrir los ojos para lograr entender que era lo que estaba pasando, pero en lugar de eso se encontró en una habitación que no era la suya, en una casa que no conocía, con ropa que no era de él. Se sentó rápidamente en el borde de la cama. Pasó las manos por sus rizos despeinandolos un poco, como si eso fuera a traer algún recuerdo a su conciencia. Sintió un ruido a un lado del cuarto. Se sorprendió al ver que era Louis quien dormía en el sillón. Caminó hacia él y lo sacudió para despertarlo.

-LOUIS. LOUIS. DESPIERTA.

-¿Ha-Harry?

-¿Qué pasó? ¿Que hago acá? ¿Por qué tengo esta ropa? ¿Por qué estas acá? ¿Donde estoy?

Louis solo pudo pasar la mano por su rostro. Gran intento para poder despertarse.

-Demasiadas preguntas para una mañana.

Dijo y sacó la sabana que lo cubría. Se incorporó.

-¿Estás mejor?

Preguntó y se agacho a buscar sus zapatillas debajo del sofá. Harry lo miró sin entender.

-Si. Pero... No respondes mis preguntas. ¿Cómo llegué acá?

-Yo te traje. En tu auto.

-Entonces. ¿Esta es tu casa?

-Si.

-Es tu habitación.

-Ajam.

-Yo dormí acá anoche.

-Así es.

Sus miradas se chocaron. Harry comenzó a sudar. Lo miró totalmente incómodo. Cerró los ojos muy fuerte.

-¿Quiere decir que nosotros dos....?

Preguntó sin mirarlo. Louis se mantuvo callado unos segundos hasta soltar una fuerte carcajada.

-¿Qué insinúas?

Harry abrió con miedo los ojos para observar su rostro.

-¿No?

-¿No, qué cosa Harry?

-Ya sabes... eso...

-Eso. ¿Qué es eso?

-Oh, ¡Vamos!. ¿Tengo que decirlo?

Louis sonrió y bajó la mirada hacia sus pies para poder terminar de ponerse sus zapatillas. Y ahí estaba Harry Styles en cuclillas a un lado del sillón preguntando indirectamente si habían mantenido relaciones sexuales la noche anterior. Hubiera sido mas fácil mentir, y decir que si. Que fue la mejor noche de su vida, que después de eso cada segundo que pasaba junto a él caía aun mas rendido a sus pies. Pero Louis no era esa clase de chico. No podía mentir. Iba en contra de su ética.

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