Penetrando El Bosque

42: ire contigo

- porque no me habías dicho nada - replique un poco confundida, por segunda vez en el día experimentaba una ira tan inmensa que creo que si se me presenta el mismo diablo en frente seria capaz de asesinarlo con mis propias manos 

- pensé que ya lo sabias - dijo Ian - creo que no debí decirte nada - empuñe mis manos

Empecé a caminar en círculos,  tenía que ir a la casa ya,  pero no se manejar y mucho menos tengo auto, joder, tampoco soy la mujer maravilla como para llegar alla en menos de 5 minutos

- llévame  - dije sin pensarlo, como siempre, lo mejor que se hacer

- ¡ QUE!!! - dijo alarmado - a donde? -

- a la casa - dije muy sarcástica creyendo que ya lo sabria

- como crees que haré eso?- dijo

- eres un lobo, pedazo de idiota - dije demostrando mi enojo, creo que mi rostro ya estaba rojo, y mi cabeza gigante del dolor en ella que tenia

- pero no me puedo convertir así como así - respondió mirando a todos lados

- entonces como? - pregunté siguiendo su mirada, algo tramaba

-  haz algo que me produzca ira- dijo

No podía pegarle, me quebraría los huesos, pensé en algo peculiar pero algo doloroso, una de mis manos se dirigió hacia la parte baja de sus pantalones, cogí su miembro y lo apreté

De repente vi como se tiro el piso y se empezaba a remover en él, su cara expresaba dolor, sus manos tocaron esa parte mientras que daba vueltas y vueltas en el suelo, se levanto nuevamente, inhalaba, exhalaba mientras tocaba su vientre,  se acercó  a mi rápidamente y me tomo del brazo, su cara estaba un poco ardida, estaba rojo notaba su ira, me arrastró hasta unos árboles que habían casi iniciando el bosque,  allí me dejo mientras que se alejaba de mi, empezó a salir pelo de su espalda, de sus brazos y piernas

Su ropa empezó a despedazarse, aumento su tamaño, su cara empezó a deformarse, de un chico guapo, con físico envidiable ahora ya es un perro grande y peludo

Se acerco a mi,  pero no me altere, sabia que no podía hacerme ningún daño, su hocico se acercó a mi cara y lamió mi cara,  empezó a aullar como un cachorro,  no preste atención a sus gentiles y húmedas caricias y me subí a su lomo

Me aferre a su cuerpo cuando este empezó a correr, se sentía muchas mas adrenalina, parecía cabalgando en un caballo pero mucho mas veloz, no definía bien los arboles y las nubes, las veía un poco borrosas por la velocidad en la que íbamos

Alcance a visualizar la casa, solo dio algunos pasos y ya estábamos frente de ella

Baje de su lomo, vi como una cabeza se asomaba por la ventana de la casa, era la cabeza de Luis, de repente cerro la cortina y desapareció, en menos de 3 segundos ya estaba fuera de la casa, estaba en boxers, maldición¡¡ acaso no le daba vergüenza salir de esta forma a plena luz del día

Sus ojos estaban rojos, sus colmillos se veían perfectamente en su boca,  se acerco quedando a pocos centímetros de mi

- EN DONDE PUTAS ESTABAS?- pregunto muy furioso

- estaba en el parque - dije mientras aguantaba la risa

- y con este tipo? - preguntó mientras lo señalaba

Me gire hacia Ian y ya estaba en su forma humana,  estaba hermoso, estaba sin camisa,  solo llevaba unas bermudas, sus brazos estaban cruzados, pude observar sus grandes bíceps,  sus entradas pero no eran tan visibles ni tan marcadas como las de Luis