Capitulo 13: Acorralados

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Narra Guido:

Cuando me desperté me encontré a mi mismo abrazando a Barby con mi brazo al rededor de su cintura y su mano posada sobre la mia, no recuerdo mucho de esa noche, quizá algunas cosas, estaba muy borracho, hay una imagen que se me viene a la mente, ella me estaba hablando mientras acariciaba mi mejilla, después hubo un beso, largo, lento y dulce, sentí como mil cosas a la vez, mientras me empeñaba en seguir recordando cosas ella abrió sus enormes ojos marrones lentamente.

- Hola Rubio ¿como dormiste?- me saludo con una pequeña sonrisa.

- joya de diez ¿vos?- dije devolviéndole la sonrisa, ella miro nuestras manos juntas y luego me miro a mi.

- bien..mejor que otras noches..che..¿podes sacar la manito?- me dijo señalando con la mirada mi brazo en su cintura.

- saca la tuya primero- dije riendo, me miro y blanqueo los ojos, se tapó la boca para disimular la carcajada y soltó mi mano.

- Nos pusimos en pedo anoche ¿no?- dijo acomodando su cabello con una mano.

- algo así... El beso estuvo muy bueno- dije pícaramente, ella se puso roja como un tomate.

-no se lo digas a nadie- pidió un tanto exaltada

- ¿es por Pato?- pregunte un poco molesto "¿molesto por que? Armido estas flashando cualquiera" dije mentalmente, bueno continuo Barby respiro hondo y por fin hablo.

-no..bueno ¡si! Por Pato y por Meli, no quiero problemas, tampoco es necesario que sepan que pase la noche acá- contesto exaltada,lo de Meli lo entiendo pero ¿por pato? Ni que fueran novios, "¡basta Armido! Pareces celoso" pensé para mi mismo.

- ¿por que si no hicimos nada malo? Además no entiendo por que te importa tanto ese salame que seguro se habrá estado revolcando con la novia- dije severamente, queria que entienda que el salame de mi hermano es como es y no va a cambiar, no queria que ella sufriera por el.

- tenes razón, pero igual prefiero que sea nuestro secreto ¿si?- pidió con mirada suplicante, su mirada me pudo y tuve que aceptar.

- bueno que sea nuestro secreto....eso me suena a prohibido- dije Haciendo que el rojo en sus mejillas sea más intenso.

- callate Armido- dijo dándome una palmada en el hombro, se levantó y fue a pedir un desayuno, cuando llego el pedido me di cuenta que era para uno, después de ver eso había algo que no me estaba cerrando.

- ¿y tu desayuno?- pregunte mirando la bandeja con solo un café, una naranja y dos media lunas.

- no me gusta- respondío seca tratando de cortar el tema ¿no le gusta desayunar? Que cosa mas extraña.

- ¿no desayunas?- pregunte curiosamente preocupado

- no, me acostumbre a no desayunar, soy más de almorzar- dijo con algo de inquietud, es muy loco pero intuí que había algo que no me estaba contando.

-¿vos tenes un desorden alimenticio?- pregunte con evidente curiosidad

-......- no dijo palabra alguna, más solo bajo la mirada.

- decime la verdad ¿tenes un desorden?- dije tomando sus manos, por un momento se mordió los labios, miro y volvió a bajar la mirada.

- yo....yo...soy un desastre- admitió cerrando los ojos en un suspiro, tome eso como un sí, entonces tome la naranja,le saque la cascara y la partí en dos mitades, mientras repartía las medialunas, después le extendi la taza de café.

-toma- dije poniendo el café en sus manos, ella me lo devolvió insegura.

- no gracias- dijo cruzada de brazos.

Confusiones De Verano (Fanfic Airbag) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora