Capítulo 32

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Los niños dejaron de tocar y Alice de cantar y todos los que en la sala se encontraban algo aturdidos volvieron a la realidad y aplaudieron, aunque aun no sabían que acababa de pasar pero Pablo si, era el sentimiento de la música de un persona que había llegado hasta el fondo del corazón de todas aquellas personas. Alice y Kevin se cogieron de la mano e hicieron una reverencia al público quien esta vez les aplaudió mas fuerte. Los niños salieron del escenario con una gran sonrisa en la cara y las piernas temblando. 

-Ha sido increíble- dijo Julia sin quitar los ojos del escenario. 

-Si - dijo Pablo. Ambos cruzaron una mirada y sin decir nada ambos caminaron juntos hasta detrás del escenario a felicitar a sus hijos por su increíble actuación. 

-Alice, Kevin ha sido increíble - dijo Julia a los pequeño. 

-Gracias - dijeron ambos a coro y miraron fijamente las manos de sus padres. 

-¿Porqué estáis cogidos de la mano? - preguntó Alice señalando las manos de Pablo y Julia que aun no se habían soltado. Rápidamente las soltaron aunque ninguno de los dos quería dejar de sentir el tacto de la piel del otro pero fue un acto inconsciente y por lo tanto no hubo reparo para ello. 

-Por nada, cariño - dijo Pablo y abrazó a su hija. 

-Hace calor ¿podemos ir fuera? - preguntó Kevin. Pablo asintió y todos salieron fuera y un radiante sol los recibió. 

-Hoy el Sol brilla muchísimo. 

-No tanto como habéis brillado vosotros dos esta noche. - dijo Pablo cogiendo de la mano a su hija. Esta sonrió. 

-Algún día brillaremos juntos. 

-Siempre te voy a estar esperando, lo he dicho miles de veces y lo vuelvo a decir, cantar contigo sería un privilegio. 

-Papá, eres el mejor padre del mundo. - Pablo no dijo nada solo sonrió, era la primera vez que le decía eso.  Julia y Kevin caminaban detrás de Pablo y Alice , también cogidos de la mano. Julia sonrió sin motivo alguno. Pablo paró en seco y espero a que Julia lo alcanzase y la tomó de la mano.  Ella no hizo nada solo la dejo allí, dejo sus dedos entrelazados con los suyos y deseó que ese momento no acabase nunca. Alice y Kevin, cada uno en una esquina, se miraron a los ojos. 

-También voy a esperar por ti - dijo Pablo y soltándole la mano a Alice depositó un beso en los labios de Julia. Esta se sorprendió pero no había motivo alguno para detener el beso que había detenido el tiempo.  Alice y Kevin se quedaron frente a ellos. 

-Te dije que al final acabarían dándose un beso. - susurró Kevin al oído de Alice. 

-Claro, las personas que se quieren se dan besos - le susurró Alice de vuelta y ambos quedaron allí de pie viendo como el tiempo se detenía para Pablo y Julia. Viendo como ambos por fin, fueron capaces de decir lo que nunca habían dicho con un beso. 


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Adoptada por Pablo AlboránDonde viven las historias. Descúbrelo ahora