Capítulo 11.

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Ya está todo listo Jayden, solo tenemos que entrar y dormir a su familia — dijo su tío mientras se colocaba su máscara negra, lo imito pues ya era hora de iniciar con su venganza—. Yo me encargare del hijo de puta, tú vas por la esposa y la hija.

Con las órdenes dadas ambos se infiltraron dentro de la gran mansión que tenían los Freitez, una labor difícil ya que estaba custodiada por varios guardias pero su estudio sobre el perímetro le permitió encontrar un punto ciego donde se podía infiltrar junto a su tío, ambos escalaron un gran muro que daba directamente con la parte de la cochera, gracias a la poca iluminación no pudieron ser detectados por el único guardia que ahí había, lo inmovilizo con una llave y lo amarro a un poste amordazando su boca para que este no emitiera ningún ruido. Entraron a la casa por la puerta que conectaba a la cocina fijándose primeramente de que no hubiese nadie alrededor, por suerte los guarias solo tenía que cuidar la parte externa de la casa, así que solo tenían que entrar sin hacer ninguna clase de ruido para no alertar a ningún miembro de la familia. Con todo ya vigilando siguieron con la siguiente fase, subieron hasta la segunda planta buscando el cuarto principal para poder inmovilizar a la pareja, al encontrarlos no les fue muy difícil ya que ambos estaban dormidos y solo tuvieron que colocarles un trapo con cloroformo para que ambos cayeran desmayados.

Mientras su tío se encargaba de amarrar a la pareja ella salió en busca de la hija -la cual se encontraba en la habitación del fondo- al encontrarla agradeció inmensamente de que se tratara de una muchacha de quince años y no de una niña o en su defecto un bebe, así la culpa no la tormentaria tanto. Entro a su habitación sin mucho esfuerzo y coloco el trapo con cloroformo en su boca, la chica opuso resistencia pero al estar acostada se le hizo más fácil colocar presión dominándola hasta que cayera desmayada. Le hizo un buen amarre por si acaso la chica e le ocurriera hacer alguna estupidez cuando estuviera en plena vía, también procuro taparle la boca cinta adhesiva por prevención, ya con todo hecho la cargo hasta la sala donde estaba su tío junto a la pareja

La chica se opuso un poco pero no le sirvió de mucho— dijo mientras colocaba a la chica junto a los padres—. ¿Te encargaste de los guardias?

Sí, les envié un mensaje con el teléfono de este. Supuestamente a la familia le salió un viaje de improvisto — respondió su tío mientras le mostraba el celular —. También descubrí que tiene problemas maritales, al parecer la esposa no está de acuerdo con lo que hizo. Incluso puedo decir que esta de nuestro lado.

¿Cómo así? — Pregunto mientras veía atentamente a su tío.

El cabron la golpeaba advirtiéndole de que no siguiera juntándose con "el enemigo" pero no sé si se refiere a la resistencia o a otras personas — respondió el hombre mientras guardaba el celular —. Ahora necesito que te vistas como uno de los guardaespaldas, les dije a los idiotas que solo necesitaba a uno y ese eres tú.

No tardo en despojar al guardia que estaba amarrado de sus prendas, lo trajeron dentro de la mansión y lo dejaron amarrado en lo más profundo de uno de los cuartos para evitar que los demás lo encontraran, montaron a la familia entera en una de las camionetas que poseían y arrancaron. Estaba nerviosa, sabía que estaban a mitad de su plan y si fallaba lo más probable es que la fusilaran en ese mismo instante, poco le importaba en cierta parte pues sabía que eso se lo merecía por causar tantas muertes, aunque quería vivir para estar con Camila dentro de ella no dejaba de pensar de que la morena merecía algo mejor, alguien que no esté tan manchado como ella lo está, una persona que no lleve tantos muertos encima y sobretodo, que no esté roto por dentro. Camila merecería a alguien mejor y sabía que ese alguien no era ella, por algo poco le importaba si moría o no pues al final de todo terminaría perdiendo a Camila.

My Warrior Writer [Camila Cabello]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora