Día tres:
Me siento aburrida y solitaria, aunque la segunda es una característica propia de mi persona hoy es uno de los pocos días en los que me afecta. La gripe se apoderó de mi cuerpo pero la fiebre ya está bajando y me permite escribir; lo bueno es que falté a clases, aunque me decidí a ponerme las pilas eso no significa que me fascine. Por otro lado me entristece no haber podido ir al parque, tengo muchas ganas de ver a Tania, la niña que conocí allí el otro día. Creo que por primera vez supe lo que es estar acompañada, valorar la presencia de alguien y también su ausencia, sobre todo la ausencia.
Mi vida ha estado cargada de ellas; la ausencia de mis padres, ausencia de amigos y de personas que me quieran, que se preocupen por mi y yo por ellas. En Tania vi eso, una oportunidad de establecer un vínculo con alguien, aunque parezca ridículo ya que solo la vi una vez, con su carita sucia y su sonrisa de oreja a oreja logró despertar ese lado dulce en mí ¿Tan carente de afecto estoy?
Son las veinte horas y mis padres tardarán mínimo una hora en llegar. Son una especie de robots programados, trabajar como máquinas, comer y dormir; esa es su rutina. Luego vuelven a casa al final del día con sus caras inexpresivas como si les hubiesen bloqueado las emociones; no lloran, no ríen y se excusan con el cansancio pero no logro saber porqué. Hace un tiempo encontré una foto de varios años atrás en la que estábamos los tres en el mismo parque donde conocí a Tania (eso lo hace aún más especial), yo tenía unos dos años y llevaba un vestido rosado de princesa en lugar de mi ropa oscura habitual y se veían tan afectuosos conmigo ¿Qué les habrá sucedido? ¿Qué bloqueó sus sentimientos de esa manera?
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Martes 13
Teen FictionEs la historia de una chica de 19 años de carácter rebelde, incrédula y valiente. Pero en realidad es solo disfraz, ya que en su interior se esconde una persona sensible y afectuosa que deberá enfrentar los desafíos que se le imponen día a día, ade...