Noche de verano.

100 3 0
                                    

Febrero del 2016, la temperatura alcanzó los 40 grados en Buenos Aires. Eso no detuvo a la gente que salió igual a cubrir sus necesidades, aunque con mala cara; y no los culpo.
00:00 de la noche, medianoche. Las nubes lloraron sobre las ciudades repletas de personas que disfrutaban de una noche feliz pero calurosa de verano. Y yo, al sentir las gotas caer sobre mis manos luego mojadas, me sentí una niña otra vez. El viento frío que golpeaba mi cuerpo y me hacía sentir feliz, y me animé a adentrarme en el llanto del cielo, mojando y dejando arrastrar todo consigo. Fui una niña otra vez, mirando la lluvia como algo hermoso, como un milagros, deseando que ese momento jamás se termine, y por un momento fui plena y sinceramente feliz.

Un Buenos Aires Nublado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora