LOVED SUBMISSIVE [HIATUS]

¿Aceptas?

Sehun nunca se había hecho esta pregunta, y en cuanto el menor la hizo, miró a otro lugar, hundiéndose en sus pensamientos. Estaba frente a un dilema moral, ¿haría eso? El antiguo Sehun lo hubiera hecho sin ningún problema, lo habría hecho en el hospital, en esa misma camilla, si fueran otras situaciones, pero... Era Zhang, era el amor de su vida, lo único que no quería era lastimarlo, y mucho menos por sus impulsos sexuales; a veces podría ser muy agresivo y hacerle daño. Guardó silencio puesto que no sabía que responder, esto ya lo había hecho antes pero como el recuerdo, su antiguo yo, se había esfumado. Lo miró a los ojos y no supo como responder. -¿Qué pasaría... si lo hiciera? No me lo perdonarías nunca... ¿Verdad?

YiXing se quedó mirando al menor, esperando por su respuesta, su mirada perdida le hacía pensar en tantas cosas que podrían estar en la mente del adverso. Cuando éste respondió con otra pregunta él simplemente se encogió de hombros. -No lo sé... Depende de las circunstancias y lo que pasaría luego... Algunas personas no se arrepienten luego de eso pero... No lo sé en realidad.

Su respuesta había confundido aún más a Sehun, no creía que tuviera el valor de hacerlo, o de que él le negara algo que prácticamente era su obsesión.

Pasaron todo el día viendo de la tv que había en la habitación de hospital, Yixing pasó toda la tarde recostado en el pecho del menor. Agradecía que en el hospital tuvieran censuras en los canales, no se imaginaba que sucedería si de repente una escena pornográfica apareciera en la pantalla y de repente el sistema nervioso del contrario se alterara. Sehun estaba aburrido y ansioso, pronto se sentó con ganas de salir. Al verlo levantarse, YiXing rápidamente lo tomó por el brazo, Sehun, al sentir como el más bajo lo detuvo, suspiró y agarró su mano dándole un beso en esta. -Yo... Debo ir al baño... No me tardo, ¿vale?

YiXing suspiró al escucharlo y asintió. -Está bien, no vayas a otro lado o salgas del hospital, ¿bueno? No quiero que nada te pase amor.

Sehun asintió con una sonrisa en su rostro, le dio un beso al mayor y salió tirando de la vara que sostenía su suero intravenoso. Salió del lugar y miró a todos lados, estaba en medio de un pasillo y no sabia que dirección tomar, el ambiente se sentía tenso y empezó a caminar lentamente; sabía que estaba enfermo por que su cuerpo le pesaba, no avanzó ni 5 pasos para que la herida empezará a darle un dolor punzante, trato de reincorporarse y seguir. -No pasa nada... Solo es mientras me acostumbro. -Dijo a sí mismo mientras sentía su cuerpo empezar agotarse; antes de dar vuelta para otro pasillo estaba sobre sus rodillas jadeando, levantó la mirada y todo se veía doble, sintió una mano tratando de sostenerlo.

-Señor Oh... Le dije que guardara reposo, esto es peligroso, no está en condiciones para caminar. -Dijo una enfermera mientras hacia señas llamando al doctor.

Era evidente que el chico no podía con su peso, parpadeó varias veces creyendo que eso le daría una vista mejor, pero no fue asi. -Estoy bien... Solo un poco mareado... -Alcanzó a decir casi en susurros antes de caer al piso, sudaba y su cabello estaba mojado como si hubiera corrido una maraton, a pesar de que sólo fueron unos cuantos pasos.

En el momento de ver como nuevamente llevaban a su novio prácticamente en brazos hacia la camilla soltó un largo y profundo suspiro mientras negaba, de seguir así nunca saldrían de ese lugar. El doctor lo había llamado para hablar con él sobre el estado general del menor, aunque realmente él supiera casi todo eso, le era casi inevitable hacer que el menor lo entendiera también, por lo que le pidió al mismo médico que fuese él quien se lo explicase.

Sehun despertó otra vez en su camilla de hospital, esta vez, tenía un aparato que bien le ayudaba a respirar, ya que al parecer el solito no pudo hacerlo. Miró a todos lados y no encontró el rostro que quería ver, se dio cuenta que estaba solo. -¿Zhang...? -Trataba de hablar mas duro, pero no tenía fuerzas para hacerlo, así que le salían pequeños susurros roncos que no se podían oír debido a la maquina de frecuencia cardíaca que sonaba a cada segundo que su corazón bombeada; no le gustaba sentirse así, poco a poco su ritmo cardíaco aumentaba debido a la ansiedad, fue entonces cuando el doctor entró a verlo, y detrás de él un chico cabizbajo. -Zhang... Creí que te habían alejado de mi... -Estaba a punto de llorar, por alguna razón no lo hizo, el doctor se acercó a el.