Jessamine - La hija de Malec

Misión: Baile (2) cap.6

Falta solo una hora, para ir al baile.
Esta tarde Ian alquiló un traje antiguo y yo me compré unos tacones plateados.
Ahora Ian se encuentra tirado en la cama mirando tv, mientras yo, en bata de baño ya que me acabo de bañar, me estaba arreglando el pelo.
Decidí por hacerme un rodete bajo.

-Me voy a bañar -anunció Ian levantándose de la cama.

-Esta bien -dije mientras me comenzaba a maquillar. Me coloqué labial color durazno, rimel y un poco de rubor.

Cuando terminé, me pinté las uñas de color coral. Y esperando a que se me secaran, me puse a ver tv.

Luego de unos 10 minutos Ian salió del baño con una toalla que le rodeaba la cadera.
Y entonces caí en la cuenta de que tenía marcado los músculos y la vista era bastante agradable...

-¿Disfrutando de la vista? -dijo Ian ronriendo pícaramente. Miré hacia el tv y negué con la cabeza.

-No.

Él río y se sentó a mi lado en la cama.

-hablemos del plan -dijo serio, yo solo asenti- estarás a mi lado toda la noche, no puedo perderte de vista ni un segundo. Jess, lo que haremos será hacercarnos a Felipe y le hablaremos. No debe sospechar que nos encontramos allí Por él. Si pregunta que hacemos allí, le diremos somos amigos de Marcie y que ella nos invitó.
Jess, tienes que actuar normal. Si Felipe termina confiando en nosotros, nos dirá sobre Thania.

-Esta bien -dije una vez que terminó de hablar.

-Si comienza a sospechar o nos metemos en aprietos, tendremos que irnos y desaparcer de la vida de Felipe -dijo aún más serio y un poco preocupado- algo que no haré es arriesgar nuestras vidas. Así que si esto sale mal, no volveremos a hablar con Felipe, no sabemos de que es capás.

-Solo quiero que todo salga bien -dije segura- prometo que no arruinaré la misión.

Ian sonrió y asintió. Luego miró su reloj y se levantó.

-Debemos cambiarnos, tenemos unos veinte minutos en auto, hasta la calle Brookling.

Yo asenti y tomé el vestido que estaba colgado en una percha en el ropero. Luego me diriji al baño y me saqué la bata de baño. Me puse el vestido y giré para admirarme al espejo, me veía realmente bien. Tomé la caja de zapatos que deje en el armario del baño y me los puse.
Al salir del baño, ya lista, me encontre con Ian haciendose el moño del traje, o tratando de hacerlo.

-Deja que te ayude -dije sonriendo, el solo asintió. Le hice el moño y me aleje para verlo- perfecto.

Él se miró al espejo y sonrió agradecido- gracias -luego me miró y sonrió aún más- estas hermosa.

-Gracias -dije sonrojándome- tu también te ves bien.

Es que Ian se veía extremadamente sexy. "Este chico tendría que ser modelo" pensé.

Ian sonrió- vamos -dijo ofreciendome una mano. Tomé su mano y senti un cosquilleo en mi panza.

Luego de irnos de hotel, subimos al auto de Ian y fuimos al baile. Yo tenía mi máscara y la de Ian en mi regazo.

-Ya estamos por llegar -dijo mirando hacia delante, luego miró el cielo- creo que lloverá.

Miré el cielo y noté que estaba nublado, también de notaban relámpagos entre las nubes. Frunci el ceño.

-Llegamos -anunció Ian- estacionamos en una calle, donde se veía una casa de dos pisos.

-Me pregunto por que no eligieron una casa mas alejada de la sociedad...

-Yo igual -dijo Ian.

Nos vajamos del auto, con los antifaces ya puestos. Ian me ofreció su brazo y yo acepté.
Caminamos por un pequeño sendero, que daba a la entrada de la casa. En la entrada, se encontraba un hombre de traje.

-Nombres -dijo serio.

-Ian Ligtwood y Jessamine Bane -dijo Ian, también serio.

El hombre asintió y nos abrió la puerta.
Dentro, la casa tenía piso de marmol y era espaciosa.
Había unas pocas personas.

Divisé a una señora con piel color celeste; a un señor que sonreía mostrando sus colmillos de vampiro; a un chico joven, de unos veinticinco, tenía piel color azul y pelo rojo; entre otros.

En otro lado de la sala, estaba Marcie, con Felipe y una señora con pelo blanco y ojos color naranja.

Ian me susurró al oído- vamos con Marcie, deja que hable yo.

Yo asenti y fuimos hacia ellos.

-Buenas noches Marcie -dijo Ian.

-Oh, buenas noches Ian -dijo y me miro- que hermosa te ves Jessamine...-miro a la señora y a Felipe- los presento, Ian, Jess, ellos son Felipe y Anastasia -dijo mirándolos.

-Un gusto -dijo Anastasia.

-Igualmente -dije.

Felipe no dijo nada. Simplemente se limitó a mirarnos a mi e Ian, fijamente.

***
Luego de una hora, sin conseguir hablar con Felipe a solas, ya se había llenado el lugar, de vampiros y brujos. Ian hablaba con un tal Jared, un brujo, amigo de su familia. Mientras yo escuchaba.
Luego Jared se fue a bailar con su pareja. Y quedamos solo Ian y yo.

-¿Quieres bailar? -susurró Ian, en mi oído.

-Si -dije feliz de hacer algo- me estaba muriendo se aburrimiento.

Ian tomó mi mano y me llevó al centro de la sala, donde bailaban algunas parejas. La música era de esas en las que bailas pegado a tu pareja. Ian puso sus manos en mi cintura y yo las mias al rededor de su cuello, y escondí mi cara en su pecho.

-¿Quieres que tratemos de hablar con Felipe? -pregunté levantando mi vista.

-Estoy bien así -dijo Ian bajando la vista para mirarme. Nuestras caras estaban a centímetros.
Creo que me sonrojé por lo que dijo y nuestra cercanía.
Él pareció notarlo y sonrió. Nuestra respiración chocaba.
Se acercó a mis labios lentamente... Y me besó.
Sus labios eran suaves... Yo respondí al beso, no era uno salvaje, sino uno delicado y tierno.
Nos separamos a falta de aire. Ian tenía una sonrisa de oreja a oreja.
Y yo debo de tener una sonrisa de idiota.

Entonces la música dejó de sonar y en el pequeño escenario, se encontraba Felipe con un micrófono en la mano.

-Buenas noches a todos -dijo sonriendo- hoy haremos un trato entre nosotros, un trato de unión. Como muchos sabéis, hay una tropa de vampiros rebeldes, que están encontra de los acuerdos. Y como los nefilims no nos hacéis caso, tendremos que actuar por nuestra propia voluntad. Nuetra meta será eliminar a esos vampiros. Y el problema es que este grupo de vampiros rebeldes, cuenta con Jashemire, el vampiro mas antiguo de esta ciudad.
Jashemire es el lider, a formado un ejército contra el acuerdo de unión entre vampiros, brujas, hadas, licántropos y nefilms. Todos sabemos que el acuerdo es muy necesario en esta ciudad. Aunque no todos queréis a los nefilims. Necesitaremos su ayuda para esto, así que necesitamos insistir -dijo Felipe y luego miró a Ian- Y que bueno, que tenemos a un nefilim aquí, entre nosotros.

Todos voltearon a mirar a Ian expectantes. Noté que Ian apretaba mi mano aún mas fuerte que antes. Lo miré y vi que estaba tenso.

-Además estamos con la hija del gran Magnus Bane -dijo Felipe ahora mirándome a mi. Yo sonreí tensa. Ian me miró, estaba serio y preocupado, muy preocupado.

Y entonces empezó a llover fuertemente. Se escuchaban los truenos y todos nos seguían mirando.