Maybe Someday •LH•

☯9

Hicieron el trabajo entre besos y caricias. Y antes de que ella se marchara, él se despidió con un largo beso que hasta por la mañana no olvidaría.

- Nadia, me gustas desde que te ví por primera vez, por favor no te alejes ahora-. Dijo Luke acunándole las mejillas con sus manos.

- Jamás-. Murmuró ella, cogiéndole las muñecas y sonriendo.

Él le volvió a dar un beso, esta vez corto y la dejó marchar.

Él entró en su casa y suspiró, al fin. Lo había hecho, y había comprovado que ella sentía lo mismo. Se aferraba a ese "Jamás" murmurado por sus suaves labios, como si fuera un ancla.

Ella, por su parte, lo primero que hizo fue llamar a Ayleen, para explicarle todo lo que había pasado con Luke, y se llevó una sorpresa, su amiga había quedado para ir a un concierto con Calum.

Las dos se quedaron hablando hasta tarde, hasta que una llamada de Luke interrumpió la conversación.

Lo primero que ella escuchó fue un: Te extraño.

Ella se sonrojó hasta la cabeza y empezó una conversación explicándose todo lo que no se habían atrevido a decirse antes.

Quedaron en verse antes de entrar al instituto, para repasar el trabajo y poder hablar sin problemas.

Ella estaba segura de que se daría prisa si tenía que verlo cada mañana antes de entrar a clase.

Estaba enamorada de él, era estúpido pensar eso, ya que solo se habían hablado una vez en la vida, pero con solo mirarse bastaba.