No eres el único sobreviviente

Capítulo 6: En busca de la tal Tsunade

Nos pusimos en marcha para buscar a esa mujer que tanto quería encontrar Jiraiya, caminamos durante un buen rato y nos detuvimos en un lugar con unos cascabeles gigantes, donde Naruto se puso a jugar, Jiraiya estaba sentado en el pasto y yo estaba a su lado.

-Jiraiya-sensei... -Digo, y si, sensei, porque él fue quien me entrenó durante un tiempo y lo sigue haciendo.

-¿Qué pasa? -Me pregunta.

-¿Por qué esta tan interesado en encontrar a la tal Lady Tsunade? -Pregunto, algo curiosa.

-Pues... te diría pero... no quiero que Naruto se entere de nada.

-¿Podrías decirme después? -Insisto.

-Claro, pero eso será una vez que vengamos de vuelta, ¿ok?

Asiento, me recuesto un rato en el pasto y empiezo a ver las nubes, moría de aburrimiento, aunque era bastante tranquilo estar aquí, sino fuera por Naruto sería más relajante, lo único que lo oigo hacer es hacer vibrar esos cascabeles gigantes.

-Naruto, ya estante en paz, esas cosas se te van a caer. -Le dice Jiraiya.

-No se caerán, están muy bien suge... ¡Ay! -Al muy idiota se le caen los cascabeles en la cabeza, sale rodando junto a ellos y se enreda.

-Tarado.

-Ay Naruto, levántate y pon los cascabeles en donde los encontraste. -Le dice Jiraiya.

-Estoy atorado, ¿cómo voy a  hacer eso?

-¿Recuerdas el entrenamiento con cascabeles que tuviste? -Pregunta.

-Si, ¿eso que tiene qué ver?

-Que es casi lo mismo . -Explica Jiraiya.

-Pero terminé amarrado al tronco -Responde Naruto.

Empiezo a reírme ya que me he imaginado como terminó Naruto en ese tronco.

-¿Tú también? -Le dice Jiraiya.

-Sí, no logré conseguir ninguno de esos tontos cascabeles que Kakashi-sensei traía. -Responde Naruto.

-Ya veo porque me dice que debe tenerte paciencia. -Dije.

-¿Eso dijo?

-Claro que no, a Ko... -Le doy un golpe a Jiraiya-. A Rin siempre le gustó bromear con las demás personas.

Naruto logra desenredarse y carga los cascabeles hasta donde estaban, yo volteo a ver a Jiraiya algo molesta.

-¿Y ahora que te traes?- Me pregunta.

-Anata wa, anata mo kono baka o iu koto ga dekinai, ji rai. Wa jibun dake ga shitte iru koto o darenimo iu koto ga dekinai, anata mo anata wa watashi no namae ga machigatte te ni watatta baai ni nani ga okoru ka shitte iru, daremoga sore ni tsuite shiranai koto o yakusoku <No le puedes decir a nadie lo que sólo tú sabes Jiraiya, ni siquiera puedes decirle a este tonto, me prometiste que nadie más sabría sobre eso, bien sabes lo que pasaría si mi nombre cae en manos equivocadas> -Le digo a Jiraiya en voz baja.

-Lo se, lo se, te matarán. -Me responde.

-Por favor, no vuelvas a hablar de más.

-De acuerdo.

-Listo, ¿ya podemos irnos? -Nos dice Naruto.

-Si, ya vayámonos, ya hemos perdido tiempo aquí, ahora quien sabe donde puede estar Tsunade. -Dice Jiraiya.

Nos vamos de ese lugar y seguimos caminando otro largo rato, Jiraiya no ha hablado durante todo el tiempo, pero Naruto insistía en que Jiraiya-sensei le enseñara algo nuevo, o más bien, lo que le prometió. Llegamos a una Aldea, había una feria o algo así.