Uno Más

CAPITULO 8: El regreso

Nicolás, después de quedar subcampeón del torneo CÓSMICO, ya era hora de volver a casa.

Luego de un largo viaje en avión regresaron a casa.

Riendo y charlando con Cristina de los momentos pasados en Japón, al abrir la puerta estaba Walk con una postura firme y una expresión muy furiosa.

-¿Tuvieron bonito viaje? Dice walk con tono sarcástico.

-si muy bonito, fue muy genial

-¿así señor Nicolás? ¿Por cuanto tiempo pensabas que ese torpe engaño suyo funcionaría?

-pues lo suficiente para que su pequeña mente se diera cuenta

-jajajaja, ríe silenciosamente Cristina

Walk la mira con mucha furia y Cristina se tapa la boca.

-señor Lanister está en muchos problemas.

-usted no me manda ni me intimida.

-hasta que usted no cumpla 18 yo tengo su custodia.

-¿Desde cuando usted tiene mi custodia?

-Desde hace tiempo señor, su padre me la heredó y soy responsable de usted. Así que vaya a su habitación. Y usted señorita Cristina debemos hablar de lo que hizo...

-Nicolás no vio de otra que ir a su habitación, ya que no es un joven problemático. Y mucho menos quería gastar energía discutiendo boba mente.

Así que fue y se acostó enseguida a dormir.

Mientras Walk y Cristina se fueron a la sala para hablar.

-Usted sabe el problema en que está metida ¿cierto?...
¿Usted sabe lo peligroso que pudo haber sido eso?

-Lo siento señor, pero no crees que debemos contarle la verdad a Nicolás.

-Su padre me dijo que lo protegiera cueste lo que cueste, y es mejor mantener esto en secreto

-PERO SEÑOR!!...

-NO SE DIGA MAS!! la vida de Nicolás esta en riesgo y nuestra misión es protegerlo.
Así que vaya a su casa y no se hable más del tema.

-esta bien señor lo siento mucho...

Después de la charla con Cristina Walk se fue a su habitación, y se sentó en una lujosa silla, y en un brazo de la silla tenia un teclado el cual ingresó una contraseña (7,0,4,6,2,4).

De repente se abrió el piso debajo de la silla y Walk cayó por un túnel.

Llegó a un laboratorio secreto donde en toda la mitad de la sala había una gran pantalla.

-Profesora Valería digame el status de los invasores.

(Valería era una joven de 23 años de edad, muy bella y muy inteligente. Tenia una estatura de 1.70, era de color trigueña con cabello rubio-castaño).

-Comandante Walk han logrado rastrear a Nicolás pero aun no han empezado a actuar.

-¿Que es lo que están pensando esos desgraciados?

-No lo sé comandante pero es mejor ir preparándonos para lo peor.

-Tiene razón Doctora Valería, sabemos muy bien que esos desgraciados son capaces de todo.

Solo podemos imaginarnos lo peor y enfrentarnos a ello.

Al día siguiente...

Nicolás despierta y está consiente que a fallado con sus estudios así que pensó repasar unos cuantos temas, pero le dio mucha hambre, bajó al comedor y ya tenían su desayuno en la mesa listo, comió tan rápido como si no hubiera mañana.

Pero mientras comía encendió el televisor y casi se ahoga con lo que escuchó.

-ÚLTIMA HORA!!

Un gran asteroide esta a un poco más de un año de chocar contra el planeta, según científicos su impacto podrá destruir todo el planeta, inteligencia militar está buscando métodos para destruirlo. Aquí estamos con el coronel Terry Jhons.
-Que tiene que decirnos acerca del asteroide y como piensan detenerlo?.

-Nuestros mayores científicos y ingenieros están fabricando un gran misil se podría decir que el mas fatal de todos, tenemos planeado lanzarlo cuando el asteroide esté por la hidrosfera ya que está mas debil por haber pasado por la atmósfera.

-Y que porcentaje de éxito podría tener?.

-puede ser un 60% de probabilidad de que todo salga bien. Así que no se preocupen todo va estar bien.

-Mas noticias del asteroide en nuestra emisión de la tarde.

-Que!!!-grita Nicolás. El planeta puede ser destruido?. Aun me faltan muchas cosas que hacer y... Aun peor todavía quiero la revancha con Kaory.

Mientras tanto en el laboratorio...

-Comandante han empezado su ataque.-dice Valería.

-esos desgraciados, yo ya decía que se habían tardado. Vamos preparando nuestro equipo de defensa. Hay que proteger a Nicolás a cualquier costo.