Antoine Griezmann

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Si miras para atrás créeme que al igual que yo, decidirás a volver a vivir cada momento juntos. Me amaste de una manera tan linda y alocada a la vez que me parece imposible olvidar tu perfume de mi piel. 

Fueron los mejores 5 meses de mi vida, no te olvidare aunque pierda la cabeza mil veces.

*Flash Back*

-Fiorela-dijo Antoine con su acento francés, ese acento que me volvía loca. 

-¿Que pasa amor?- pregunté acercándome a él quien tenía en sus manos un sobre, el mismo que hoy por la mañana había retirado del hospital. 

-¿Esto es? - Meneo su cabeza y me miro esperando una respuesta. No supe que hacer ni mucho menos decir. 

-¿Lo abriste?- pregunté con curiosidad.

Negó con la cabeza, entonces era el momento para decírselo.

 -Yo.. Em.. Es que... - No sabía como empezar -Lo que pasa es - bufe al no poder concentrarme en decir una sola palabra - Abrilo - ordene y acto seguido me di la vuelta para no mirar su reacción. Seguramente se enojaría demasiado, ya que al ser un futbolista muy reconocido aquí, no le caería bien tener... 

Sus brazos sobre mi cuerpo me asustaron dejando todo pensamiento atrás. 

-Me gusta la idea de ser padre- Y aquella confesión hizo que mi corazón diera un vuelco por completo - Pero sabes que no me puedo hacer cargo públicamente

*End Flash Back* 

Sus palabras retundaban en mi cabeza haciéndome recordar como desde ese momento nos dijimos adiós.

-Fiorela Cavalari - Me llamo la doctora Ríos. 

Deje todo recuerdo atrás para dedicarme sólo y exclusivamente a mi hija. 

-Buenos días Fiorela- dijo con amabilidad la mujer invitándome a sentarme al frente suyo. 

-Hola Sandra ¿que tal? - le sonreí y me acomode en la silla. 

-Bien, ¿Como estuvo la pequeña? ¿Algún síntoma o molestia raro? - Pregunto anotando algo en su libreta. 

-No, estuvo un poco inquieta este último tiempo pero nada más - hable tranquila. 

-Es normal, toma - me entregó un papel - Compra estas vitaminas para afrontar tu último mes de embarazo - Asentí con una media sonrisa que al instante me la devolvió. 

Me guío hasta la camilla para controlar que Maia estuviera bien. Escuchamos su corazón, pude contemplar lo hermosa y grande que se encontraba dentro mío y para finalizar me entregaron la ecografía en fotos. Cada mes, guardaba las fotos en una caja para enseñársela cuando creciera.

Llegue a casa cansada, sin ganas de nada, hacia tiempo que no me sentía así, un tanto deprimida. 

*Flash Back* 

Era de noche y con Jimena nos preparábamos para salir a bailar, España un viernes a la noche explotaba con todo. Desde que llegamos un chico no me sacaba la mirada de encima, sus ojos verdesazulados penetraban con deseo sobre mi cuerpo y yo no era de esas chicas que se hacían esperar, camine a paso decidido hasta chocarme con el dueño de esos ojos tan cautivadores. 

Pero al instante lo reconocí: Antoine Griezmann, futbolista francés, el nuevo refuerzo del Atlético de Madrid.

Retrocedí sintiendo como la barrera que me separaba de él se hacia cada vez mas grande, Antoine se percato de mi acción y comenzó a caminar a mi dirección. Mis pasos se hicieron mas rápidos y la acumulación de gente me dificultaba seguir mi camino. Una mano se poso en mi cintura y un beso húmedo sobre mi cuello me di la vuelta para encontrarme con la persona que hace minutos trataba de esquivar.

One Shots de Fútbol ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora