5. ¡¿Penny?!

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Ese día desperté con un dolor de cabeza increíble, mi esposa Penny estaba durmiendo y no se había levantado. Miré a través de la ventana. El pasto cada vez se secaba más y los frutos de los árboles caían y se marchitaban. Me levanté de la cama y me dirigí al cuarto de Molly, ella también se encontraba durmiendo. Apenas pude desayunar, tomé mis cosas y me largué al trabajo, tenía mucho que hacer.

Al salir tomé el periódico, el cual no tenía buenas noticias.

50% de muertes para mañana

Científicos predicen que para el sábado por la mañana la mitad de la población humana que estaba viva el lunes estará muerta. Así como el número de victimas aumenta a niveles inconmensurables, equipos de todo el mundo siguen en busca de una cura.

Disturbios están tomando lugar por todo el mundo y saqueos en masa. Esto... [...]

-Escalofriante- me dije. -¡Tengo que encontrar esa cura cueste lo que me cueste!

De pronto veo un auto acercándose a la casa, era mi jefe con todo el equipo de científicos.

-John te necesitamos en el laboratorio. -Podríamos intentar algo, pero entendemos si quieres quedarte con tu familia

-Obviamente voy a ir con ustedes, esto lo provoqué yo, yo lo solucionaré

Así que fuimos al trabajo, la calle estaba completamente desierta, solo algunas personas caminando e incluso cuerpos de personas.

-Que horrible, lo que he provocado

-Lo que hemos provocado, querrás decir

Al llegar a las oficinas bajamos del auto y vimos a alguien moribundo.

-Por favor, ... encuentren la cura

-Se lo prometo, su muerte no será en vano

Entré al hall, motivado por sus palabras me dirigí hacia mi oficina, pero me topé con Annie.

-Ey, que bueno que hayas podido venir

-Si, ya lo creo

-Sabes... este podría ser nuestro último día en la Tierra y quería preguntarte algo

-¿Si?

-Te gustaría, tal vez... ¿irnos de este lugar?

Ya sabía a lo que se refería.

-Ya te lo dije antes, tengo una linda esposa y una hija, no te necesito- dije mientras iba a la oficina.

Hoy habíamos hecho un gran progreso, aunque aún nos faltaba algo, una cosa que no lográbamos descifrar. Encontramos una sustancia que podría ser la candidata para combatir la otra droga, pero aún faltaba algo, un mínimo componente el cuál haría a la cura completamente efectiva. En un abrir y cerrar de ojos el día pasó y el jefe nos mandó a todos a casa.

-John, si mañana no nos volvemos a ver, quiero que sepas que eres un gran amigo

-Tú también

Abracé a todos mis compañeros, nadie sabía con certeza si el día de mañana moriríamos.

El jefe me prestó un auto, debido a que yo dejé el mío en mi casa. Así que me dirigía a mi casa. En el camino habían el doble de cuerpos que en la mañana, era algo escalofriante. Además no había alumbrado público en la calle, era muy peligroso.

Al llegar a mi casa noté algo extremadamente extraño, en la puerta del baño se encontraba un charco muy grande de sangre. Decidí inspeccionar, algo malo debe de haber ocurrido, pensé. Al entrar logré ver a mi esposa, ella estaba dentro de la bañera, cubierta de sangre. Estaba muerta y yo no pude hacer nada. Sólo logré arrodillarme mientras quitaba su cuerpo para enterrarla.

Gracias por haber leído, se aproxima el final, así que estén al tanto

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Gracias por haber leído, se aproxima el final, así que estén al tanto. Los quiero <3 bye bye.

One Chance: ¿La cura?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora