La Última Promesa|| [SinEditar]

Capítulo 14

Ya ha pasado más de un mes y no he sabido nada de Peter y tampoco de Matt.
Pero eso me ha ayudado para tener más en claro que es lo que quiero en mi vida.
Quiero terminar mi último año en el instituto, y quiero irme a la capital a estudiar escritura creativa y literatura. Conocer de arte y buena música, conocer muchos lugares y personas, quiero escribir un libro maravilloso y desgarrador.
Quiero encontrar el verdadero amor de mi vida...

En estas cosas del amor no soy la mejor. Nunca había besado a nadie antes de que Peter lo hiciera, y obviamente, nunca he tenido novio. Creo que leer tanto y enamorarme del protagonista masculino, me ha hecho incapaz de amar a alguien real.
Pero aun creo que hay alguien con el que pueda crea nuestra propia historia de amor. Con el que pueda sentirme valiente, con el que pueda vivir grandes aventuras como la de mis libros. Y que al juntarnos, nuestras almas se vuelvan una sola.
Quiero creer que en realidad existe alguien que se puede enamorar de la chica tímida, asocial, malhumorada y con poco atractivo. Así como yo.
Pero creo que mis pensamientos son en vano.
Los chicos que conozco, solo valoran la belleza exterior, sin importar lo bella que puede ser la mente de una persona en realidad. No se toman el tiempo de conocer a alguien y tratar de comprenderla.
No se dan cuenta que la belleza exterior es solo superficial, y que en realidad la persona puede ser horrible por dentro.

Intento seguir con la esperanza cuando paso por el parque y veo a una pareja de ancianos tomados de las manos y él le hace gestos de caballerosidad a su amada. Me hacen recordar que el amor eterno si existe, pero solo para ciertas personas.

Perdí toda esperanza cuando en el primer año en el instituto, para el baile de bienvenida, un chico me invito y al final descubrí que solo me había invitado por una apuesta con sus amigos.

Cuando supe lo que paso, fue el peor golpe que me han dado.

A partir de entonces le he cerrado las puertas al amor.

Al seguir reflexionando, lo tengo aun más en claro... moriré sola y sin haber amado.