La Última Promesa|| [SinEditar]

Capítulo 17

Matt detiene el auto cerca del parque. Salimos y empezamos a recorrer los pasillos de arbustos, en la noche las luces iluminan todo el parque, lo que le da un aspecto mágico. También se puede ver la luna y las estrellas haciendo de esta noche más hermosa.
Cuando volteo, Matt tiene la vista fija en mi y esta sonriendo.
-¿Qué? - le pregunto
-En este escenario pareces un hermoso ángel. Mi ángel.

Después de ir a comprar una malteada, no sentamos en una banca en el centro del parque.
En el kiosco estaba una orquesta tocando una hermosa melodía y decidí concentrarme en las notas. Al parecer Matt notó lo que hacia, así que se levanta y me ofrece una mano.
-Señorita Ali, ¿Me concedería esta pieza? - dice mientras hace una reverencia.
-No sé bailar- bajo la mirada.
-Yo te enseño- levanta ligeramente mi mentón haciendo que lo vea a los ojos.

Me conduce al centro del kiosco. Pone mi mano en su hombro y con la otra sostiene mi otra mano. Después pone su mano un poco más arriba de mis caderas y hace que me acerca más a él. No puedo evitar sonrojarme por el acto.
Empezamos a balancearnos un poco al compás de la musica, y noto que me sostiene como si fuera un tesoro demasiado frágil y que en algún momento se quebrará.
Hace que de un giro y vuelve atraerme hacia él, después me inclina hacia atrás y su rostro queda muy cerca del mio.
No puedo evitar mirar sus labios y el hace lo mismo conmigo. Me levanta y por un momento, todo el ruido a nuestro alrededor se vuelve ajeno a nosotros.

-Señorita Ali, ¿Puedo besarla? - es casi un susurro confidencial. No respondo, pero mis ojos me delatan. Quiero que lo haga.
Se inclina hacia mi y el primer contacto es suave, y después respondo un poco más decidida.
Me causa un sentimiento que nunca antes había sentido hacia alguien.

Después de bailar, decidimos comer algo y fuimos a un restaurante muy bonito.
-No quiero que tu atuendo sea en vano- me dice
-No tienes que hacer todo esto por mi. -digo
-Claro que si. Para mi es un honor cenar con usted, señorita.

Una amble mesera nos guía hasta nuestra mesa, y Matt me ayuda a sentarme en la silla.
Se sienta frente a mi y nos entregan el menú.
Pedimos cordero asado y ensalada, y nos sirven un poco una bebida espumosa bastante dulce.
-¿Te agrada este lugar? - me pregunta cuando terminamos de comer.
-Es mucho para mi. Yo prefiero algo menos concurrido.
-Bien, pues vamos-
-¿A donde? -
-Ya verás-
Después de pagar la cuenta, nos dirigimos a su auto. Durante el camino, no me dijo nada sobre s donde íbamos. Cada vez estoy más intrigada.