La Última Promesa|| [SinEditar]

Capítulo 22

No entiendo por qué Peter estaba así, pero siento que hay otra cosa que le afecta. Y no solo de mi.

Intento secar las lágrimas pero es inútil. Cada vez que recuerdo lo que acaba de pasar, los ojos se me llenan de lágrimas.
Suena mi móvil y es mamá que me llama. Intento calmarme para contestar.
-Hola mamá, ¿Cómo te va?
-Bien cariño. Te sientes bien, te escucho un poco mal.
-Estoy bien, es solo que me siento un poco resfriada.
-Cuidate mucho. En unas semanas más llego. Sabes, acabo de conocer a alguien y pensé que tal vez tú...
-Me alegra saberlo. Mereces volver a ser feliz.
-Gracias Ali. Te amo.
-Y yo a ti mamá. - y cuelga.
La idea de que mamá conozca a alguien, me alegra. Merece ser feliz y disfrutar el resto de su vida con alguien que la ame.

-Hola, Ali -dice Rose cuando abro la puerta. Después de que mamá llamara, le pedí a Rose que viniera- ¿Qué pasó?
-Peter vino a mi casa. Parecía un loco y me agredió. - no puedo controlar las lágrimas que empiezan a brotar de mis ojos.
-¿Por qué? - me abraza.
-Piensa que yo debería estar enamorada de él, como lo está conmigo. No soporta la idea de que este con Matt. No sé que le pasa. Ese no es el Peter que yo conozco.
-Pues yo tendré que hacerlo entrar en razón.- parece un algo molesta.
-No hace falta Rose-
-Claro que hace falta. No es justo que te arruine tu primera relación.- me sonrojo.-En este momento voy a hablar con él.
Intento detenerla pero ella se marcha.

Me lastima que Peter piense de esa forma. De que ma haya tratado así.
Tiene razón de que conoce todo de mi, y yo de él, pero no es excusa para que yo me enamore de él. El amor no se controla. No lo puedes controlar o manipular.
Nunca pensé que Peter pudiera sentir algo así por mi, porque siempre salía con alguna chica, y no me daba indicios de algún sentimiento amoroso... o si.
Lo único que sé, es que no quiero volver a verlo.

No, por ahora.