Pequeña Amanda

Accidente

Ese beso hizo que se le cristalizaran los ojos a Amanda hasta el punto de casi llorar.
Si uno se ponía a pensar, todo paso porque un día se encontró con un completo desconocido en un parque, luego se volvieron a ver. Ese desconocido se enamoro estúpidamente de ella, resultaba ser hermano del "amor de su vida" y ahora duermen juntos y se besan ¿qué clase de locura es esta?

Quedaron abrazados por 20 minutos hasta que Amanda se largo a llorar.
Daniel la abrazo todavía más y le dijo al oído..
    -No llores, amy..-
Amanda ya no sabia que decir, tenia la mente en blanco, ese beso...  La hizo olvidar todo, tranquilizarse por el insulto de Eric y logro que su corazón latiera de nuevo... Al mismo ritmo que latía con Eric... Estaba enamorada de Daniel y no se podía mentir.
    -Pequeña...- Dijo Daniel al oído de Amanda.
   -Dani...-
Daniel no evito reírse, era tan dulce, era tan perfecta, era tan hermosa, era mucho para el.

Amanda levanto la mirada apoyada con sus hombros a los costados de la cabeza de Daniel.
Se quedaron mirando se a los ojos por unos largos minutos...
Esos ojos color aceituna deslumbraban a Daniel. No se resistió y se acercó a sus labios aún húmedos.
Un pequeño beso casi sin rozar sus labios, justo en ese momento Rose subió al cuarto de Amanda a cerciorarse que todo estuviese bien, ya que no se escuchaba ningún ruido hace horas.
Al abrir lentamente la puerta y que ellos ni se dieran cuenta de que pasaba..
Le brillaban los ojos a esa viejita al ver que su nieta, su vida, su todo, había encontrado el "amor".
Al verlos se le escapo decir "son tan lindos", cuando Amanda la escucho se apartó de Daniel y se levanto de la cama.
   -¡Abuela!- Gritó Amanda al ver a su abuela parada ahí.
   -No te preocupes, mi vida, venía a cerciorarme de que pasase algo malo-
   -Gracias abuela-
   -Bueno, los dejo, solos- Rose volvió a irse con una sonrisa de punta a punta.

Cuando Rose se fue del cuarto Amanda se sentó en el borde de la cama y Daniel se levanto para sentarse a su lado...
   -Amy ¿quieres salir?- -Así te despejas un poco- Pregunto Daniel.
   -¿A donde, cariño?-
A Amanda le había costado decirle algún apodo y cuando lo logro se ganó un abrazo de Dani.
  -Emm, podemos ir a una plaza o a tomar un helado-
  -Bueno, vamos, me cambio y bajo-
   -Dale, voy bajando, tu cambiate-
Daniel salió del cuarto pero cuando estaba a unos metros se acordó de decirle a Amanda que tenia su celular.. Casi sin hacer ningún ruido abrió la puerta del cuarto y... Si, Amanda se estaba cambiando... Estaba mal, ver morbosamente a una niña así, pero no, no podía sacar los ojos de enzima. Su mente lo atormentaba, tenia que irse de ahí, cerró la puerta sin ningún ruido y se fue directo a la escalera mientras trataba de quitar de su mente lo que había visto.

Amanda se puso un vestido celeste pastel de manga corta que le llegaba a las rodillas, los championes que tenia ya puestos, unas medias blancas casi trasparentes y si su saco gris preferido.
Se peino y se ató el pelo con un lazo azul. Amanda pronta para salir, bajó a la cocina para saludar a su abuela e irse.

Daniel la esperaba abajo, su abuela no estaba de acuerdo en que salieran, Amanda tenia que seguir en reposo.
Amanda termino de arreglarse y bajo uno por uno esos angostos escalones.

Daniel quedo mudo al verla, era hermosa... Ese vestido... Ese pelo... Esa figura... Era simplemente perfecta y eso enamoraba a cualquiera... Después de lo que había visto veía a Amanda de otra forma.. Una forma mas linda, sabía lo hermosa que era por afuera y por dentro de su ropa.
Al ver bajar a su nieta, Rose, le dijo que tomara su medicina y vallan tranquilos, pues, en el minino ataque le puede causar un infarto y ya era suficiente para todos aún Amanda deseara su muerte.

Daniel sonrojado por el pequeño accidente de hace unos minutos se acerco a Amanda tocándole el hombro y mirándola a los ojos.

-Hija, toma tu pastilla, así te sentirás mejor.- Dijo Rose extendiéndole su mano con medicina a Amanda.
-Si, abuela.-
-Mi pequeña... Por favor cuidate, no se que haría si algo malo te pasa-
   -Si abuela, me voy a cuidar, te quiero-