Desperté con un terrible dolor en la mejilla, definitivamente Alex tenía fuerza.
Me paré sin ánimos de la cama, el día anterior ella no había querido hablar conmigo, y yo no quise insistir demasiado, hubiera sido peor. No es que el que ella se quedará en casa de sus padres fuera bueno, pero si me quedaba yo a pelear, las cosas podrían haber sido desastrosas.
" Buenos días." Dije a mis amigas, las cuales ya estaban desayunando.
Ali me lanzo una mirada de odio y luego volvió la vista a su plato.
" Hola, Tobs." Contestó Ashlyn. " Ali está un poco molesta."
" Lo he notado."
Me senté junto a ellas, y me serví un buen plato de cereal, me sentía hambrienta.
" Como no voy a estar molesta. Tobin acaba de arruinar las cosas. Ahora Alex no querrá saber de ella nunca jamás." Dijo Ali, con las mejillas coloradas del enojo.
Yo sabía que las palabras de Ali eran ciertas, tal vez, el haberme guardado la verdad me podría causar perder a Alex para siempre, pero de un modo extrañamente raro, prefería eso a verla sufrir otra vez. Cuando yo la conocí, ella estaba sumergida en un mar de depresión, odiaba a su madre con cada célula de su cuerpo, no podía verla ni en pintura. Y ahora, me resulta extraño, ver que ella y Pamela se quieren de nuevo.
" Yo sólo hice lo mejor para ella."
Ali soltó una carcajada. " No puedo creer que no pienses en ti, ni un poco. Cuando sea muy tarde, te vas a arrepentir de la decisión que acabas de tomar, Tobin."
" Siempre haré lo que yo consideré mejor para Alex."
"¿Y por eso harás que te odie?" Preguntó, lanzandome una mirada asesina.
Definitivamente, si las miradas mataran, Ali me habría matado en ese momento.
" Ella tiene razón, Tobin. Tu siempre has sido lo mejor para Alex."
" Ya es muy tarde para arrepentirme, ¿no?"
Y lo era. ¿Qué clase de cobarde sería si me arrepiento ahora? No necesito sabotear a Pamela para poder estar junto a Alex, no haré trampa. Puedo enamorarla por la buena, siendo yo misma. Ya me había funcionado una vez. ¿Qué lo iba a hacer diferente ahora?
" Grandioso, ahora tengo que ir a una maldita terapia que Alex me hizo programar, y lo peor es que no estará conmigo." Dije un poco triste.
" Llamala y dile que te acompañe, ella seguro ira contigo." Dijo Ashlyn con una sonrisa.
" No querrá ir. Hablamos de Alex Morgan, la reina del orgullo."
" Yo te ayudare a convencerla. Vamos, Tobin. Lo peor que puede pasar es que diga que no." Estiró su mano y me paso su teléfono.
"¡Tobin Heath!" Gritó Ali. " Hazlo o te juro que toda mi vida te recordaré lo tonta que fuiste anoche."
Suspire un poco frustrada, pero al final marque el número del celular de Alex.
" No creo que sea una buena idea." Susurre nerviosa.
Sonó un par de veces, ya era muy tarde para arrepentirme.
"¿Harris?" Preguntó Alex con voz adormilada.
Claro, ella siempre se levanta tarde.
" No, soy Tobin. Antes de que cuelgues yo... Bueno, creo que primero te debo una disculpa, no quise arruinar tu noche, ayer."