Ellie abrió sus enormes y verdes ojos con dificultad. Se encontraba en una habitación negra, sin nada en las paredes. Ella intentó buscar algo que recordaba o que le recordara a algo, pero no encontró absolutamente nada. Buscó por donde salir, por donde respirar. Golpeó las paredes, golpeó el piso. Más tarde se le olvidó cuales eran las paredes y cual era el piso. Golpeó, gritó, rasguñó. Pero simplemente no podía abrir nada.
Cuando de repente descubrió el mismo patrón que siempre sufría y nunca recordaba. Porque su mente se encargaba de eliminarlo todo. Hasta a ella.
Cuando recordó lo que le había pasado, no pudo más que odiarse.
Sí, otra vez estaba atrapada en su propia mente.
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Historias cortas.
AcakHistorias cortas totalmente expresivas. Dejando a la mente fluir.